Colombia y Brasil protagonizaron en Bogotá, el peor partido de la primera fecha de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial de Sudáfrica 2010. Igualaron 0 a 0 y no dejaron absolutamente nada. Si bien el dueño de casa hizo un poco mejor las cosas, careció de desequilibrio en los metros decisivos para golpear al campeón de América. Por su parte, la Verdeamarelha se mostró irreconocible y sus principales figuras -Kaká, Ronaldinho y Robinho- faltaron sin aviso a la primera presentación del equipo que conduce Dunga.
Dentro de un primer tiempo opaco, que encontró a dos equipos realmente lentos y repetitivos en ataque, el conjunto local tuvo más la pelota y generó las mejores situaciones. Zúñiga y Vélez se proyectaron constantemente y le ganaron la pulseada a los laterales brasileños, Maicon y Gilberto, quienes rara vez cruzaron la mitad de la cancha. Ferreira fue salida constante por la izquierda y se encontró bien con Falcao García, que junto a Rentería complicaron a la última línea visitante.
La primera de peligro fue para Colombia, a los dos minutos: Ferreira llegó hasta el fondo, tiró el centro atrás y Falcao la punteó afuera. Luego, Castellón la volvió mandar al medio con comodidad, Rentería metió un buen cabezazo y Júlio César se lució con una atajada bárbara. Brasil estuvo desconocido. Ronaldinho dejó en evidencia que no está pasando por un buen momento, pese a haber forzado una atajada de Agustín Julio a los 25’, Kaká apareció en cuentagotas y Robinho se perdió en firuletes improductivos.
Frente a este insípido equipo brasileño, los Cafeteros se sintieron cómodos y se animaron a tocar, aunque siempre con un ritmo demasiado cansino. La última de la etapa inicial también fue para el local: Falcao volvió a ganar por la derecha, la tiró al segundo palo y Rentería no logró cabecear bien ante la marca de Lucio. Colombia fue algo mejor, pero careció de ese pase preciso para dejar mano a mano a sus atacantes.
El segundo periodo mostró a una Colombia en posesión del balón, pero sin desborde, y a un Brasil totalmente metido en su campo, sin ideas, arranques individuales o remates desde afuera. El local, con los ingresados Ramírez y Grisales, ganó en control por el medio y perdió en velocidad por las bandas. Y obviamente no logró poner en aprietos a un combinado visitante que se cerró por completo.
Las únicas chances de peligro en el complemento fueron para los locales y llegaron con disparos desde afuera que Julio César controló sin mayores inconvenientes. Tan malo fue lo de las estrellas brasileñas que sólo Ronaldinho jugó los 90 minutos. Baptista y Afonso, quienes reemplazaron a Kaká y Robinho, tampoco se destacaron. Fue un 0 a 0 que se olvidará fácilmente, da cuenta TyC Sports.