Era 27 de octubre de 2010. Los dirigentes políticos de todo pelaje se agolpaban para decir algo ante el micrófono. Todos querían balbucear una idea, exhibir el dolor ante lo inesperado: la muerte de Néstor Kirchner, hecho que dio vueltas el escenario político tal como estaba planteado a ese momento.
Entre tantas voces, sonó extraña la de alguien desconocido para las organizaciones políticas. Mariano Kohan tomó el micrófono para confesar que jamás se interesó por la política, que lo suyo es su trabajo como empresario en la venta de automotores, pero que la intensidad de lo vivido ese día lo estaba empujando a “hacer algo” a partir de entonces.
Según la crónica de Página Política, Kohan no paró. Se constituyó en referente local de La Cámpora; pasó a encargarse de las iniciativas culturales de la organización que tiene un diputado -Pablo Mendoza-, y un concejal -Juan Manuel Huss-; en cuanto acto hubo de campaña y de los otros, estuvo Kohan allí con la remera del Nestornauta y con el paraguas que identifica a la agrupación.
Con su nombre, La Cámpora tendrá ahora a un representante en el gabinete de la intendenta Blanca Osuna. Kohan, que ya estaría cumpliendo funciones pero aún sin nombramiento, sería confirmado en el cargo de director para encargarse de las políticas en materia deportiva.
Según trascendió, el dirigente ocupa ya un despacho en el municipio, tiene gente a cargo y está trabajando en lo que le han encomendado, algo que no imaginaba para sí el 27 de octubre de 2010.