El director de Investigaciones de la Policía, Luis Albarracín, confirmó que ambos “estaban de paso por Paraná cuando fueron localizados por efectivos policiales en una estación de servicio”, alrededor de las 14 de ayer.

Según dijo Albarracín, a los policías “les llamó la atención ver a un hombre grande con un pequeño, y cuando investigaron al vehículo, descubrieron que tenía pedido de captura; entonces procedieron a la identificación de los ocupantes y confirmaron que se trataba de la persona que estaba siendo buscada en Misiones”, explicó.

El hombre quedó detenido inicialmente en la alcaidía de tribunales y fue puesto a disposición del juez de Instrucción Nº 3, Alejandro Grippo, a la espera de lo que resuelva la Justicia misionera. En tanto, el pequeño quedó a cargo de agentes del Consejo Provincial del Niño, el Adolescente y la Familia (Copnaf), quienes dispusieron una serie de medidas para resguardar sus derechos, mientras se aguarda la llegada de su madre, procedente de Posadas. “El niño se encuentra en perfecto estado de salud”, aclaró el jefe policial a El Diario, a dos meses de que fuera secuestrado por Denjean.

Historia de un secuestro

El caso de Denjean tuvo repercusión nacional. Norma Gómez contó que el sábado 21 de diciembre, a las 10.30, entregó a su hijo Tomás, de 5 años, a su padre frente a una Iglesia Adventista, en la esquina de Bolívar y Junín, en la capital misionera.
El hombre se comprometió a devolver a su hijo al día siguiente, pero como no lo hizo, la mujer lo llamó por teléfono. “No lo vas a volver a ver nunca más”, le espetó Denjean desde el otro lado de la línea. Al día siguiente, Norma recibió otro llamado, esta vez desde un número no identificado, en el que el hombre le dijo que no volvería a ver al pequeño hasta pasada la feria judicial, cuando se presentaría ante la Justicia para luchar por la tenencia. Desde entonces, no volvieron a hablar.

La mujer inició un desesperado reclamo, primero policial y judicial, luego a través de los medios de comunicación, difundiendo fotos de ambos, y hasta hubo marchas por el centro de Posadas, exigiendo la aparición del niño.

La mujer contó que había conocido a Denjean en 2007 y que Tomás era fruto de esa relación, que se interrumpió tres años después porque era víctima de violencia de género. El año pasado, la pareja intentó retomar la relación, pero volvieron a separarse por la reincidencia del hombre en la violencia psicológica. No obstante, Norma permitía al hombre ver a Tomás inclusive más veces que las que habían acordado judicialmente.

Hasta el momento no ha trascendido dónde estuvieron en estos meses en que Denjean permaneció prófugo. Se habló de que tenía contactos en Entre Ríos, Santa Fe y Buenos Aires, que podría haber estado de vacaciones en Brasil y que tenía recursos económicos para sostener una vida de prófugo. “Tenemos miedo de que cruce la frontera ilegal, el menor no tiene permiso”, había dicho hace unos días Miriam, una hermana de Tomás.

Ayer, finalmente, después de dos meses, la Policía lo encontró en Paraná. Ahora Tomás podrá volver con su mamá.