Además, indica que el fallecido fiscal Alberto Nisman se quedaba todos los meses con una porción del sueldo de $41 mil pesos que Lagomarsino recibía como empleado de la UFI AMIA. A la salida de la fiscalía N°45, Rusconi evitó hablar sobre el contenido de su escrito y sólo se limitó a decir que su defendido “no oculta información”.
“Lo único que pretende [Lagomarsino] es que la causa mantenga el objetivo de investigar lo que pasó con Nisman”, aseguró el abogado.
Lagormarsino, técnico informático y estrecho colaborador de Nisman, es quien le dio a Nisman el arma desde donde salió el disparo que terminó con su vida.
Comportamiento cuestionable
Durante los últimos días, Rusconi dijo en distintas oportunidades conocer datos “de la intimidad” del fiscal que “demuestran un comportamiento cuestionable”.
El abogado de Lagomarsino hizo el anuncio en respuesta a Sandra Arroyo Salgado, ex mujer del fiscal, quien declaró que su ex pareja tenía con Lagomarsino una relación de mucha confianza y se refirió, puntualmente, a una cuenta en Estados Unidos que Lagomarsino compartía con Nisman y con la madre y la hermana del fiscal.
“Para nosotros no tiene importancia a los efectos de esta investigación, pero no queremos que se generen suspicacias que no corresponden”, dijo Rusconi antes de presentar el escrito.