"Siempre estuve tranquilo", aseguró, escueto, Mascherano, rodeado por periodistas y fotógrafos mientras se retiraba de la Audiencia Provincial de Barcelona, situada en el Passeig de Lluís Companys, en el centro de la ciudad condal.
El juicio contra el Jefecito, figura del Barcelona y la selección argentina, sólo duró unos minutos. "El señor Mascherano no es un delincuente, tuvo un asesoramiento equivocado y ha asumido la responsabilidad", afirmó por su parte su abogado, David Aineto, en declaraciones a Télam.
De pie frente al juez, Mascherano se limitó a decir "sí, estoy de acuerdo", cuando se le leyeron las acusaciones en su contra y las penas solicitadas por la Fiscalía, que habían sido pactadas a principios de diciembre.
La base del acuerdo judicial fue el reconocimiento por parte del jugador Azulgrana de los delitos fiscales cometidos en 2011 y 2012 en relación con la tributación de sus derechos de imagen por un valor de 1,6 millones de euros, que ya devolvió al fisco.
De acuerdo con la sentencia, Mascherano saldará sus cuentas con la justicia pagando una multa de 816.000 euros, que corresponde a la suma del 40 por ciento del importe de la multa por el primer delito (235.128 euros) y el 60 por ciento de la segunda (581.344 euros).
Asimismo, la estrella del fútbol mundial recibió una pena de cárcel de cuatro meses por el primer delito y de ocho meses por el segundo delito. A pesar de ello, no tendrá que cumplir prisión ya que la ley española establece a partir de los dos años el límite de cumplimiento en caso de que no existan antecedentes penales, como es su caso.
Por ese período de tiempo, Mascherano no podrá ejercer su derecho a voto ni beneficiarse de subvenciones públicas, según el fallo.
Durante la audiencia, la defensa de Mascherano propuso al juez sustituir la "suspensión" de la pena de prisión -una decisión que aún debe tomar el tribunal pero que se da por hecho ya que la acusación no se opone a ello- por el pago de una multa de 30 euros durante 720 días, lo que da una suma de 21.600 euros.
Sin embargo, el abogado del estado objetó la petición, con lo que el magistrado anunció que se tomaría un tiempo para decidir sobre el asunto, consigna Télam.
La Fiscalía española acusó al jugador del Barcelona por no haber tributado en sus declaraciones de IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas) los ingresos obtenidos en 2011 y 2012 provenientes de sus derechos de imagen obtenidos de la marca Nike.
De acuerdo con la investigación, esos pagos fueron eludidos simulando la cesión de sus derechos de imagen a empresas "instrumentales" domiciliadas en paraísos fiscales.
Las rentas las obtenía a través de una sociedad domiciliada en Miami (Estados Unidos) y simulaba la cesión a otra empresa radicada en la isla de Madeira, en Portugal.
"Hoy Mascherano ha cumplido con la Justicia", remarcó su abogado. "El jugador ya ha acabado su calvario con este asunto", añadió.
Por otro lado, Aineto explicó que solicitó la multa en lugar de la suspensión de la prisión precisamente para que el tema no quede abierto, pero que la próxima semana probablemente se pueda conocer la decisión.
El letrado reconoció que Mascherano, quien se presentó a los tribunales vestido de negro y semblante muy serio, ha sufrido un poco la exposición mediática por sus problemas con la Justicia.
"Le ha afectado, claro. La gente interpreta el ir a un juzgado penal como una cosa peyorativa, pero Mascherano es un señor y lo ha demostrado hoy", zanjó el abogado.
Los problemas de Mascherano con la justicia española son similares a los del crack rosarino y máxima figura del Barcelona, Lionel Messi, quien está imputado junto con su padre por evadir 4,1 millones de euros y tendrá que afrontar un juicio el próximo 31 de mayo.
En el caso de Messi, el jugador se declaró inocente y su padre se atribuyó toda la responsabilidad. Si bien la Fiscalía pidió el sobreseimiento del astro argentino, el juez decidió enviarlo a juicio.