Era una de las mejores prácticas futbolísticas de Patronato en lo que va de la pretemporada. Juan Casado había abierto el marcador para uno de los equipos, tras una hermosa definición y luego Matías Quiroga capitalizó un rebote, tras una excelente jugada de Jorge Torres, poniendo el juego en tablas.
Cuando el reloj marcaba el minuto 20 (normalmente se vienen jugando partidos de 35 minutos), Quiroga y Facundo Talín disputaron un balón en el área y en la pelota dividida terminó golpeado el defensor. El zaguero reaccionó mal y se retiró del campo de juego, con claras muestras de ofuscamiento (incluso pateó una botella).
Esto produjo que el entrenador Marcelo Fuentes detenga el entrenamiento y decida cambiar de planes, suspendiendo el partido y realizando movimientos tácticos, con los dos refuerzos (Quiroga y Pablo Bastianini) y algunos juveniles, mientras el resto del plantel se dirigió a estirar.
El DT, tras la práctica minimizó lo ocurrido, marcando que, “las cuestiones que tienen que ver con roces y demás son producto de que a algunos jugadores les estamos pidiendo tanto en lo físico que en algunas jugadas llegan a destiempo, tienen incoordinaciones y normalmente la incoordinación va de la mano del fastidio, que se sucede porque uno quiere realizar algo para lo que no está pleno. Cuando levantemos la carga de trabajo va a ver mucha más calidad y menos roce, porque han hecho un trabajo para realizar una de las mejores pretemporadas que yo he visto en cuanto al esfuerzo de los jugadores”.
Además el técnico hizo referencia a que ninguno de los futbolistas rojinegros puede sentirse mal por no creerse dentro del equipo, esgrimiendo que todos saben su forma de trabajar. “Yo dirijo para el jugador y todos saben cómo van a ser los procesos de trabajo. Yo invierto en charlas y después trato de vivir en consecuencia a lo que habló, así que todos saben que es lo que les va a pasar en los procesos de trabajo. Hay una sola forma de meterse en mis equipos y es mostrando calidad. Jugador que esté en siete u ocho puntos y no tiene posibilidad, porque creo que hay otro de siete u ocho puntos, si mantiene el nivel en algún momento se mete y se queda”, marcó Fuentes en referencia a este tema.
Este miércoles el plantel Santo realizó dos turnos de tareas. Por la mañana se movió en el campo de Golf del Club Estudiantes, mientras que por la tarde trabajó en el estadio Presbítero Grella. Allí, el entrenador dispuso de tareas tácticas, haciendo hincapié en la forma de jugar que tendrá el equipo (modificaría su juego, teniendo en cuenta que no está Diego Jara y que los delanteros que posee el conjunto son todos de área).
Luego hubo 20 minutos de fútbol, en donde se alinearon dos equipos. Uno conformado por: Sebastián Bértoli; Gerardo Acosta, Walter Andrade, Ignacio Boggino y Faundo Torres; Diego Romero, Marcelo Guzmán, Gabriel Bustos y Jorge Torres; Matías Quiroga y Pablo Bastianini. El otro elenco formó con: Carlos Morel; Gabriel Graciani, Marcos Minetti, Facundo Talín y Mauricio Escobar; Leonardo Acosta, Emanuel Urresti, Daniel Pereyra y Martín Cabrera; Juan Casado y Juan Manuel Lazaneo (luego ingresó Leopoldo Gutiérrez).
La de este jueves será la última sesión de doble turno, donde los jugadores por la mañana se trasladarán al gimnasio de aparatos del club, mientras que en el ensayó vespertino trabajarán en la cancha número 2 del Club Interprofesional.
Cuatro son los futbolistas de Patronato que trabajaron ayer de manera diferenciada. Mariano Echagüe (se recupera de una sería lesión y está a un mes y días de recibir el alta médica para volver a realizar fútbol), Leonardo Roda (tiene un problema en la planta de uno de sus pies), Lucas Márquez y Damián Pacco (los últimos dos con molestias tras una dura pretemporada).
Por su parte, el defensor Franco Miranda se ausentó a los entrenamientos del miércoles. El zaguero sufre de otitis y esto le impide poder trabajar junto al resto del plantel. Los médicos del plantel ya lo medicaron y si está mejor este jueves volverá a moverse con sus compañeros.