
Newell's dominó por momentos, pero el que se llevó el triunfo fue San Martín gracias a su efectividad.
Boyé fue el delantero más incisivo del Rojinegro y convirtió al arquero Ardente en figura. Sobre el final el ex River tuvo el consuelo del 1-2 pero no hubo tiempo para más.
San Martín tuvo el gran mérito de pegar en los momentos justos con los goles de Denning y Mattia y Newell's chocó contra una muralla llamada Ardente, gran responsable del triunfo local.
Para San Martín el triunfo es una inyección anímica para comenzar el certamen, en tanto que para Newell's la derrota profundiza el mal momento futbolístico que sufre desde el segundo semestre del año pasado, finaliza Télam.