El representativo "Albiceleste" conquistó un título inédito para el softbol argentino.
Desde junio, el softbol argentino vive sus horas más gloriosas. Este jueves, el seleccionado masculino, integrado por 12 entrerrianos, se consagró campeón en los Juegos Panamericanos de Lima al superar a su par de Estados Unidos por 5 a 0. La obtención de la medalla de oro se trata de un logro nunca antes alcanzado para este deporte y fue posible bajo la conducción del paranaense Julio Gamarci, a cargo del plantel que venía de ser campeón mundial en República Checa.
Este jueves, el equipo conformado por mayoría de paranaenses (11) se impuso a los estadounidenses y consiguieron cerrar invictos el certamen en suelo peruano. Fue la séptima victoria consecutiva, porque antes había superado a México (4-3), Venezuela (1-0), Estados Unidos (3-0), Cuba (8-1), Perú (13-0) y Estados Unidos (7-0) en semifinales.
La formación Albiceleste venía de conquistar su primer mundial de mayores en República Checa, luego de doblegar en la final a Japón por 3 a 2, en junio pasado. Esta vez, conquistó por primera vez el oro panamericano y sumó ese metal a las dos medallas de bronce que logró en Santo Domingo 2003 y Toronto 2015.
Los entrerrianos en el plantel son: los paranaenses Santiago Carril, Federico Eder, Gustavo Godoy, Manuel Godoy, Román Godoy Herbel, Juan Ladislao Malarzuk, Teo Migliavacca, Mariano Montero, Bruno Motroni, Gonzalo Ojeda, Gian Scialacomo y Alan Peker (Villa Clara).
Además del entrenador Gamarci, también oriundo de la capital provincial, su cuerpo técnico cuenta con otros paranaenses: Javier Martínez (Jefe de equipo), José Guerrinieri, Kevin Bolzán, Gustavo Guerrinieri (asistentes).
La presea dorada alcanzada por el softbol es la novena para la delegación argentina en el transcurso de la cita en territorio limeño.
El momento de la consagración (gentileza TyC Sports):
El partido
Argentina pronto comenzó a cimentar su triunfo definitivo para bañarse en oro con dos carreras en la segunda entrada del jardinero derecho Santiago Carril, máximo anotador de Argentina en el Mundial, y del bateador Mariano Montero.
Un error de los norteamericanos a la hora de llevar la bola a la primera base, seguido de un buen golpe del tercera base Juan Malarczuk, permitió una nueva carrera más para Argentina anotada por el segunda base Federico Eder durante la quinta entrada.
Los siguientes bateadores de Argentina ayudaron instantes después a sumar dos carreras más, completadas por el jardinero izquierdo Teo Migliavacca y el propio Malarczuk.
Con ello quedó sentenciada la gran final a falta de dos entradas por disputarse y ante la fiesta de los argentinos en las tribunas del estadio, que eran mayoría frente a los seguidores del conjunto norteamericano, silenciados por la superioridad de sus rivales.
Estados Unidos se había garantizado la plata al acceder a la gran final apenas dos horas antes al derrotar por 4-7 a México, que se quedó con la medalla de bronce, publica TyC Sports.