Marcelo Comas
El púgil entrerriano Ulises Cloroformo López tendrá por delante una nueva prueba en su objetivo de seguir subiendo escalones en el concierto del boxeo nacional. Es por eso que este sábado afrontará uno de los más desafíos más importantes de su efímera pero fructífera carrera dentro del boxeo rentado: se trata de la disputa del título vacante Continental de las Américas ante Mauricio El Torito Mariño en la categoría Súper Welter, cinturón que pone en juego el Consejo Mundial de Boxeo (CMB). Sobre las expectativas que se generaron en torno a este combate, el boxeador nacido en la localidad de Villa Clara, departamento Villaguay, aclaró que no se trata de un combate más. “El sábado vamos a tener que dar lo mejor porque vamos a enfrentar a un rival que viene confiado en su experiencia y vendrá con la intención de arrebatarme el título”, confió.
-¿Cómo se ha desarrollado tu preparación con vista al combate ante Mauricio Mariño?
-Venimos entrenando fuerte desde hace mucho tiempo; a la mañana en la parte precompetitiva, haciendo tres turnos diarios, empezando a la mañana con la parte de footing y trabajos de velocidad con Roque (Romero Gastaldo, su entrenador). Durante la tarde cumplíamos la parte del gimnasio con boxeo y ocupábamos alrededor de tres horas en esas tareas. Y a la noche se completaba la jornada con la parte de aparatos, y consiste en una gimnasia olímpica para tomar mayor fuerza y elevar la dureza de la pegada. Durante los últimos 20 días se dejó la preparación con aparatos para poder aflojarnos y comenzamos con el guanteo en la ciudad de Santa Fe. En la vecina orilla nos entrenábamos junto a Marcos Chino Maidana, desarrollando toda la etapa de guanteo, porque se debe tener en cuenta que el púgil santafesino es uno de los referentes del boxeo nacional. Para mí es un placer entrenar con él y tenerlo como sparring es muy bueno porque es un diestro que anda muy bien y es muy veloz. En la semana previa al combate hemos estando haciendo guantes con Diego Alzugaray, también en la vecina capital, en el gimnasio del Club Olimpia, donde nos abocamos a definir aspectos para llegar de la mejor forma al pleito. Este es un boxeador más liviano que nos otorga mayor velocidad, dándonos la posibilidad de medirnos durante siete rounds y probar su capacidad con la zurda. Al final terminamos con pegadas a la bolsa. Nos estamos preparando bien, a conciencia, sabiendo que el sábado vamos a tener que dar lo mejor. Ojalá pueda definir la pelea lo más rápido posible y obtener el título ante mi gente.
-¿Cómo surgió la posibilidad de pelear por un título de semejante relevancia?
-No es una chance que nace de la nada. La posibilidad surge a raíz de una pelea que protagonicé en el Luna Park. Allí tuvimos contacto con un promotor de la talla de Osvaldo Rivero; quedamos bien vistos, quedaron las puertas abiertas, cumplimos con lo que teníamos que cumplir y él se comprometió a llevar adelante lo pactado. Entonces, prometió seguir atentamente mi carrera, es decir, nos iba a observar de lejos, porque nuestra postura era no firmar nada, y en consecuencia él aceptó nuestras condiciones. De esa manera buscamos hacer más peleas, contar con un buen caudal de experiencia y si nos iba bien, volvíamos a pelear a Buenos Aires. De esta forma, se generó una buena relación con Rivero y hace un tiempo nos llevó a pelear a Mar del Plata; en esa plaza hicimos una buena pelea ante las cámaras de TyC Sports. La concreción de este combate (por el título vacante) apunta a que esto no solamente sea ganar el título, sino que signifique el principio de algo importante en mi carrera o en la del Torito Mariño. Es bueno para un púgil de nuestra provincia que se le brinden este tipo de oportunidades.
-¿El próximo sábado en el Club Echagüe, el público que asista al festival va a observar en el ring a un Ulises López más experimentado y sin tanta ansiedad como en sus comienzos?
-Se puede decir que tengo más experiencia pero, como siempre digo, cada pelea son experiencias nuevas, nada está dicho cuando uno sube arriba del ring, cualquiera puede ser el vencedor más allá de la confianza que tenga uno en el momento del pleito. Arriba del ring sos una máquina, entonces cualquier cosa puede pasar, pero me siento cada vez con mayor madurez. He pasado por distintas etapas: lesiones y distintas adversidades. Tuve una pelea en Villaguay, donde me quebré en el primer round y gané en el quinto. Ante Martín Martínez caí dos veces, me levanté y gané por nocaut; combatí hace poco frente al Hueso Oliva (posee 50 peleas y una basta trayectoria) y le gané por nocaut en el segundo round. Todo suma y todo cuenta para sentir que puedo ganar el título.
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