Hugo Remedi
-¿Urribarri es la mayor frustración que ha tenido o mayor fracaso político de Busti?
-(Piensa) Urribarri es una persona que fue 12 años diputado provincial gracias a que yo lo fui a buscar en el año 1991 a General Campos, donde había realizado una mediocre gestión como intendente. Todos los cargos los tuvo colgado de mi saco y también fue gobernador gracias a que decidí que así fuese y luego entre todos pusimos la fuerza necesaria para que él fuera entonces gobernador, si no, no hubiese podido serlo.
-Y eso último, ¿fue bueno o malo?
-Creo que el análisis va a venir cuando termine su mandato. A ver: si tenemos mejor salud, mejor seguridad, mejor educación y bienestar… Sin embargo, creo que el balance va a ser absolutamente negativo.
-¿Es posible que ustedes dos terminen acordando, como especula buena parte del peronismo e incluso de la oposición?
-No, no. No sólo que con Urribarri he roto una relación política, bah, yo creo que no tiene formación política y ese es el problema… Pero él ha decidido seguir a los Kirchner y ellos son para mí una versión diabólica del peronismo. Yo estoy en el peronismo “No K” y así voy a seguir en ese camino hasta al final. El alineamiento de él detrás de los K no es por convicción, de formación, sino que es un tema de billetera, de negocio.
-¿Tampoco tienen trato de tipo personal?
-Tampoco tengo un trato personal con él. Ya me ha demostrado que no es la persona que fingía ser y se demostró que el general Perón sigue vigente en el pensamiento cuando decía que el poder no cambia a las personas sino que las muestra tal como son.
-Busti, ¿está enojado y nervioso, como dicen?
-No (risas), no, no estoy ni enojado ni nervioso, tampoco. Lo que sí, yo tengo frente mío el aparato de marketing más grande de Entre Ríos a cargo de dos personas que no tenían calzoncillos cuando yo los conocí: (Sergio) Gómez y (Ignacio) La Barba quienes, indudablemente, mueven muchísima plata conectados con el actual director de Prensa de la provincia, (Pedro) Báez, que ahora tiene un buen pasar. Los otros dos son multimillonarios y usufructúan una maquinaria impresionante tanto a nivel nacional como provincial, y nosotros no tenemos eso.
-¿Cómo se combate contra ese aparato que estás denunciando?
-Pero bueno, yo estoy acostumbrado a pelear en la adversidad y sé, por otro lado, que hay muchos dirigentes o seudo-dirigentes, algunos por convicción, la mayoría por conveniencia, que van a jugar con Urribarri. Lo que pasa es que cuando uno hace las cosas por convicción no le tiene que preocupar el final de esto. Yo estoy convencido de que me va a ir bien. De cualquier manera, estoy contento, no voy a tener ningún problema de frustración personal porque estoy en este camino por convicción.
-¿Es imposible imaginar una continuidad K tanto a nivel nacional como provincial?
-Argentina no resiste otro mandato de los K ni de los alcahuetes de los K. Pasamos a un Estado chavista, yo he hablado con mucha gente que tiene posibilidades de hacer inversión pero que no la va a hacer hasta ver si se van los Kirchner o no.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)
