Claudia Martínez
Especial para ANÁLISIS
Físicamente no ha cambiado nada de ese chico que se animaba a conducir los actos en la escuela de San Benito. Con varios años más y un montón de experiencia encima, Cristian Bello dejó su pueblo natal hace ya mucho tiempo y hoy se destaca en los medios locales. Ya tiene un Martín Fierro; y eso, aunque él le reste importancia, lo destaca sobre el resto.
Está al frente de Nunca es tarde, de lunes a viernes, de 19 a 20, por Canal 9 Litoral; produce para la señal de cable Gigared, y trabaja para LT 14 desde hace más de dos décadas como empleado de la radio. Su carrera tuvo un empuje con Ana María Álvarez, la periodista concordiense que estuvo años al frente de la mañana de la radio.
Ahora, desde hace 12 años, Cristian está en LT 14, conduciendo De Igual a Igual, de lunes a viernes, de 9 a 12.
A la hora de la nota, la cita fue en su productora, un día feriado. Él mismo preparó el café. “La verdad es que no sé cómo funciona esto”, se excusa mientras el olor a pintura invade su oficina. “Perdón, pero están pintando la escenografía de nuevo”, detalla mientras sirve café y se apoltrona en su sillón. Se relaja y se lo ve involucrarse en la nota.
A la hora de los repasos, recuerda que hasta los 12 años su vida fue normal, como la de cualquier chico, pero luego vinieron momentos duros de separación. “Prefiero recordar las cosas positivas. Con mi papá estuve poco tiempo. Él amaba el fútbol y mi hijo va a la escuela de Boca, frente a la que antes era mi casa. Las vueltas de la vida…que increíble… que sorprendente es la vida. Uno nunca se va de esos lugares…”, dice nostálgico.
Papá de Santino y Genaro, Cristian Bello es un empresario ya asentado. Poco y nada quedó de ese chico que la remaba los fines de semana y los fines de año en LT 14. Los esfuerzos y la insistencia tienen su recompensa.
Sobre la mesa de su oficina hay un texto publicitario con su foto, próximo a salir.
(Mas información en la edición gráfica de ANALISIS del 26 de marzo de 2015)