Claudia Martínez
(Especial para ANÁLISIS)

Fue difícil combinar una hora para la nota. Tiene muchas actividades en diferentes lugares de la provincia. Cuando se lo ve por la calle está apurado, trajeado, y cuando hace calor, prolijamente en mangas de camisa.

Roberto Alonso Romani (60) nació en Larroque, Entre Ríos el 26 de enero de 1957. Es el mayor de cuatro hermanos y un tipo que ama lo que hace. Y se le nota. Licenciado en Ciencias de la Comunicación entre sus pergaminos se cuentan el de haber sido director de la Editorial de Entre Ríos, subsecretario, secretario de Cultura y, hoy, asesor cultural de la Gobernación de la Provincia de Entre Ríos.

“Estudié en la Universidad Nacional de la Plata. Hasta los 16 años viví en el campo”, cuenta. “Hice toda la primaria en la escuela de Pehuajó Sud e hice toda secundaria en la escuela de las Hermanas Franciscanas de Gante. Ahí me recibí. Esa congregación me marcó. Ellas y el padre AlbertoPaoli Lovera, que aparte de ser el cura de Larroque era director teatral, me marcaron positivamente para siempre en mi vida”, dice animadamente mate en mano, sentado muy temprano en su despacho, que comparte con otros empleados de Cultura de la provincia.

“Aprendí a meterme en el arte, empecé allí a hacer música, literatura, con las hermanas y con el padre. Fue fundamental para mí esa etapa”, recuerda de su infancia.

Se recibió en el ´77, a los 20 años, como Licenciado en Comunicación Social. Trabajaba en radioy comenzaba a hacer sus primeras armas como presentador en algunos escenarios mientras actuaba. El deporte también pasó por su vida, como redactor de automovilismo en una revista de la provincia de Buenos Aires. Le gustaba mucho el mundo de los medios, pero cuando se recibió renunció a todo porque quería regresar a Entre Ríos.

Trabajó en Radio Universidad y hacía informativos en Radio Provincia.

Le gustabanHugo Guerrero Marthineitz, Antonio Carrizo, Héctor Larrea y los grandes de la radio a los que alguna vez conoció, como todo periodista que se precie de tal.

—¿Hablaste con ellos alguna vez?
—Sí, los conocí y tuve oportunidad de hablar con ellos, sobre todo con Antonio Carrizo cuando vino una vez a animar la Fiesta del Tango en Rosario del Tala. A Hugo Guerrero Marthineitz lo fui a ver una vez a Radio Belgrano. A CachoFontana lo vi varias veces. De las mujeres me encantaba Blackie, que murió en el ´77 y la conocí también. Cuando era estudiante le hice una nota.

—¿Cuando eras estudiante tenías el sueño de entrevistar a alguien? ¿A quién? ¿Lo cumpliste?
—Sí, con ellos, porque vivía en el campo yo. Y era de los que arriaba los terneros para el campo. Yo era el mayor de cinco hermanos, mi papa murió hace 4 años. Él se llamaba Roberto y mi mamá se llama Elsa Gette. Mi abuelo era vasco francés. De los bajos pirineos, pariente de los Aguer. Mi abuelo era pariente con el padre de Pedro Aguer. Mishermanos son Elsa, Susana, Patricia y Remigio.

Renunciar a todo y venirse. Y así comenzó a hacer sociales en el diario Noticias de Gualeguaychu, bautismos, casamientos.“Luego me fueron dando responsabilidades más grandes”, agrega. En ese momento el director era Julio Majul, ex senador, a quien lo une un gran afecto.

“Fue una experiencia re linda y luego fue a buscarme la gente del directorio de Radio Gualeguay para que me fuera y terminé allá.Allá hacia informativos y algo de móvil. Luego comencé haciendo Por los senderos Argentinos, con el folclore, con la cultura, durante 24 años. Estaba a las 7 de la mañana en la radio, hacía informativo y además hacía el programa. Al año se va Mario Alarcón Muñiz, que era director artístico. Se fue a Concordia y al año yo era director artístico de la radio. Era LT 38 Radio Gualeguay y allí empecé a hacer un programa periodístico a la mañana que se llamaba La Revista de la mañana. Luego cuando Mario volvió a la radio hice La revista de la tarde.También hacía otro programa con información regional desdeGeneral Galarza. Y los domingos al mediodía hacía uno de poesías.

—¿Siempre hiciste lo que quisiste?
—Siempre pude elegir lo que me gustaba, que no es menor.

—¿Cómo hacés para estar todo el día de buen humor? Es raro verte con el ceño fruncido.
—Porque no celebro tantos los recuerdos como me llenan de esperanza los proyectos, me parece que está ahí el secreto.Es decir, tengo recuerdos hermosos pero me levanto pensando todo lo que voy a hacer. Eso te obliga siempre a estar bien. Tiene que ver con mi vida, soy y fui muy feliz. Pude disfrutar de mis padres, hace cuatro años perdí a mi papá y lo disfruté hasta el últimodía. Mi mamá es un ser excepcional. Y estoy casado con Patricia con quien tengo dos hijas, Lorena y Lucia. Lorena es profesora de Lengua y Literatura, y Lucía sigue mis pasos.

(Más información en la edición gráfica número 1054 de la revista ANALISIS del jueves 16 de marzo de 2017)