El secretario General del Sindicato de Empleados de Comercio, Daniel Ruberto,  se refirió a la situación del sector en el contexto de la pandemia y la posibilidad de una segunda ola de contagios.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Ruberto sostuvo que “hay un goteo de cierres y mucha preocupación en el comercio, excepto en alimentos y bebidas que también tienen su retracción”. Como ejemplo, mencionó que “la venta de carne se ha resentido mucho y la gente se está pasando a segundas marcas”.

Además, mencionó que “en el sector de electrodoméstico están sobreviviendo, porque hay problemas con la importación de ciertos insumos y no tienen todos los productos que se podrían ofrecer”.

De todos modos, resaltó que “está vigente la doble indemnización y la prohibición de despidos” y definió que “el panorama es tristón en el comercio; no hay grandes despidos pero hay expectativa de ver qué pasa si viene una segunda ola; el comercio está resistiendo pero con problemas”.

En cuanto a la pérdida de empleo, el dirigente sostuvo que “el trabajo que se pierde hoy no se recupera más, porque va siendo reemplazado por el comercio electrónico que con la excusa de la pandemia y el no contacto tuvo un gran crecimiento, y eso también brinda otro tipo de trabajo como de transporte o correos”. “Pero la retracción en los productos como zapatería o indumentaria es terrible. Si la economía se contrae un 19,5% tiene una implicancia muy medible, excepto en alimentos donde la gente se la rebusca”, explicitó.

“Hoy en los barrios han crecido los pequeños comercios, como fábrica de milanesas, pollería, verdulería, pero es todo de gente que ha quedado sin trabajo. Otra opción laboral en Paraná no existe; el supermercadismo se está achicando muy por goteo, el grupo De Narvaez compró un gran supermercado que no produjo ningún despido pero acepta retiros voluntarios para hacer un pequeño achique o adecuación, pero las expectativas no son de crecimiento por el momento”, sentenció.

Sobre la realidad de la precarización en los hipermercados, Ruberto aclaró que “el 100% de los empleados están en blanco, si trabajando los domingos o feriados se les pagan horas extra  como corresponde y se cumple con toda la legislación laboral, que a veces en el comercio barrial, local y pequeño no siempre se cumple”.

No obstante, admitió que “sí hay cierta precarización en el supermercadismo de origen oriental”. Respecto de la instalación de más comercios de este tipo, explicó que “en Argentina hay una restricción muy drástica para hacerse de dólares y el supermercadismo chino viene con préstamos en dólares que eventualmente deben devolver, y como esto no se está produciendo hay una especie de amesetamiento y no se abren nuevos locales”.

En el caso de la cadena de supermercados Dia%, que es un sistema de franquicias, diferenció “que una cosa es la propietaria, con sus locales propios, donde se cumple con la legislación, y otra cosa es cuando se terceriza el comercio donde sí hay una precarización. Es un formato pensado para que trabaje la familia y no siempre se cumple la legislación”.

Por otra parte, en relación con los pequeños comercios Ruberto dijo que “es un sector que tiene una informalidad importante porque gran parte del 40% de trabajadores en negro que dicen que hay en Argentina según relevamientos del IDNEC no siempre es en una fábrica que necesita una especialización importante del trabajador, en el comercio hay ciertas actividades precarizables por la baja especialización que requieren”.

“Como Sindicato tenemos obligación de defender al trabajador y es una discusión filosófica:  quiero que se trabaje ocho horas con el salario correcto, que si trabajan un domingo o un feriado se les paguen las horas extras como corresponde, que tengan sus 14 días de vacaciones hasta los cinco años y 21 días después, que tengan licencia por maternidad y lactancias. Es toda la legislación a cumplir y por eso cuando uno quiere invertir en un comercio tiene que hacer esta evaluación de cuánto costará tener un trabajador. En algunos lugares del mundo es más estricto y en otros es más laxo”, concluyó.