La primera etapa del plan de forestación en el Parque Urquiza contempla la plantación de 50 ejemplares de jacarandá, producidos en el Vivero Municipal, en la zona de la Costanera Baja. Además, en el sector de la fuente de agua ya se plantaron lapachos.

Personal municipal trabaja en la reposición de especies en la Costanera de la ciudad, pensando en aumentar y proteger el estado de la flora de uno lo sectores más emblemáticos de la ciudad.

El subdirector del Vivero Municipal, Carlos Morvidone, explicó: “Estamos llevando buenos ejemplares a la ciudad y se está haciendo muy buen trabajo, desde la producción hasta la plantación. Se pone fertilizante, se cambia la tierra y se suma protector para hormigas. Pedimos que la gente los cuide, ya que son un beneficio para todos”.

Lo programado estipula la continuación de la intervención en los diferentes sectores del Parque, utilizando diferentes especies según corresponda. Por ejemplo: Jacarandaes en la zona del monumento a Urquiza y otras especies ornamentales como el brachichito de flor roja o tulipanero de Gabón, entre otras.