"En su momento le dimos una mano inmensa (al intendente Azcué), pero es una persona que no escucha", cuestionó la diputada.
La diputada provincial concordiense, Liliana Salinas, habló acerca del respaldo del electorado el domingo 26 de octubre a la gestión provincial de Rogelio Frigerio y a la nacional de Javier Milei, destacó el triunfo del oficialismo que fue “sorpresivo” por el margen obtenido. Además, la legisladora del bloque unipersonal del Partido Conservador Popular, en diálogo con el programa El Séptimo Día (Radio Plaza), destacó el proyecto de presupuesto provincial 2026, al tiempo que lamentó la situación social y económica en la ciudad de Concordia y cuestionó a la gestión del intendente Francisco Azcué.
—¿Qué impresiones le dejó el resultado de las elecciones pasadas?
—Fue bueno, fue positivo. Nos sorprendió a todos, para algunos para bien, otros para mal, pero nos sorprendió a todos, más allá que era una elección a la cual teníamos mucha confianza. Creíamos que iba a ser una elección muy pareja, pero no, la verdad que sorprendió. Es muy lindo lo que pasó. Yo siempre digo, el derecho que tenemos los ciudadanos de expresarnos, el momento que nos escuchan, realmente es en el momento las elecciones. Y la gente se expresó. Así que fue muy gratificante, fue una elección porque la trabajamos mucho ese domingo, hacía calor. Cada vez era más sorpresivo una vez que se iba acercando más la hora. Esperamos estar nosotros a la altura de la circunstancia de lo que la gente votó.
—Usted ha sido crítica de las cuestiones negativas del ajuste y sobre todo de las políticas en discapacidad, por su pasado de lucha en este campo ¿Cómo ve la situación actual?
—Tengo un nene con 21 años que fue el que me llevó a empezar este mundo, la discapacidad, que es un mundo que muchas veces miramos de afuera, lo desconocemos. Hace 21 años que yo lucho por los derechos de las personas con discapacidad. Desde el primer momento, tenía 32 años cuando nace mi hijo. Era muy chica y me encontré con unas paredes tan gigantes enfrente que no sabía por dónde ir. Entonces es lo mismo que pasa hoy. Yo lo vivo a esto hace 21 años. No es novedad. El tema es que no se salía a decir, no se contaba tanto. Mi nene siempre tuvo el Iosper en su momento, hoy es OSER, lo venimos reclamando, pero de toda la vida: el pago, las prestaciones. Todo eso fue siempre. Si vemos un poquito más atrás, siempre salimos los papás a reclamar el pago, por ejemplo, de las prestaciones de nuestros cuidadores. Siempre fue así, entonces eso no cambió y, de hecho, para quienes tenemos personas con discapacidad en nuestra familia no ha cambiado. Sí pedimos y exigimos de alguna manera que se trate de cambiar todo eso, que alguien hable de discapacidad. Por eso yo cada evento de discapacidad participo y acompaño, porque yo estando como ciudadana común, que lo sigo siendo, pero que hoy estoy con una responsabilidad más grande, me dolía mucho y me molestaba cuando nadie se hacía eco de eso. Entonces, trato siempre de acompañar todo lo que sea discapacidad. Pero no es novedad lo que te quiero decir. Por eso no cambió esto el pensamiento de la elección, porque por más que intentaron hacer miles de ruidos, los que realmente lo vivimos desde adentro sabemos que esto no es novedad. Sí, de mi parte, por ejemplo, ahora que estamos tratando el presupuesto y esas cosas en la Cámara, voy a exigir y lo estoy exigiendo desde todo el año que el gobernador empiece a hablar de discapacidad, porque si nosotros no hablamos de discapacidad, entonces nadie va a hablar de discapacidad.
—El presupuesto provincial 2026 está en Comisión ¿qué pudo ver al respecto?
—Lo entiendo poco, no soy experta en esto, tampoco soy contadora. Uno trabaja en salud, pero no somos ignorantes a la realidad. Este es un presupuesto que si realmente se presenta así va a ser bueno, si se aprueba, si cada peso como está hoy puesto va a cada lugar donde tiene que ir. La verdad que a mí me dio mucha tranquilidad porque cuando recién iniciamos nuestra gestión no había plata, el presupuesto era mínimo, nos habían cortado las manos de todas formas. Entonces fue muy difícil para todos nosotros porque éramos la cara visible y la gente no entiende. ¿Por qué? Porque nos habían dejado una provincia con un presupuesto demasiado corto y que no teníamos acceso a nada. Entonces, ver ahora que tenemos la posibilidad que se empiezan a abrir un poco las puertas, que empiezan las obras, que empiezan las escuelas, el movimiento, que empiezan a hacer obras en los hospitales, todas esas cosas, la verdad que te da un alivio y una tranquilidad enorme. Así que creo que va a ser realmente muy positivo. No creo que haya mucha gente en contra de esto, más allá de que, por supuesto, hay gente que no está de acuerdo en algunos números, pero creo que, charlándolo, como venimos, vamos a llegar a un buen consenso entre todos.
Creo que es una herramienta que necesitamos. Los municipios han presentado también presupuestos coherentes. Nada es descabellado, lo necesario, lo justo, lo que realmente el ciudadano necesita. Sabemos que estamos atrasados en todo, así que estamos trabajando, lo seguimos trabajando el lunes y creo que nos vamos a poder poner de acuerdo todos para poder salir con este presupuesto lo antes posible.
“Concordia necesita un auxilio”
—¿Cómo está la ciudad de Concordia? ¿Cómo la ve usted, oriunda de allí, más allá que ahora está con en el cargo legislativo en Paraná? ¿Cómo viene evaluando la gestión del intendente Francisco Ascué, donde también ahí obtuvo el oficialismo un triunfo bastante cómodo? Históricamente sigue siendo una de las ciudades más pobres del país en cada publicación del Indec.
—Yo creo que hoy por hoy se nota mucho eso. En otros años era más un juego político, que se trataba de desvirtuar un poco la realidad. Eso lo veíamos nosotros viviendo en Concordia. Hoy no. Hoy la verdad que es muy alarmante la situación de Concordia. Los barrios están muy decaídos, son una tristeza enorme. Mucha gente en los comedores, en los merenderos, muchos niños. Te apena mucho porque la fuente de trabajo de Concordia es todo lo que sea la producción y ha sido muy castigada la producción y no vale lo que valía antes. Entonces, es muy poco, es muy corto también los periodos que hay. El arándano no llega ni a dos meses cuando era algo que empezábamos antes, finales de agosto y terminábamos en diciembre, hoy ya está terminando. Entonces, todas esas cosas traen acarreado que no hay otra fuente de trabajo más que esa. Hay muy poca fuente de trabajo. Entonces, la verdad que es bastante desconcertante. Pero bueno, la gente hace tan llevadera la situación que nosotros visitamos los barrios, tratamos de darles una mano, muchas cosas no publicamos. A mí no me gusta jugar con la necesidad de la gente, nunca me van a ver publicar algo de eso. Pero sí soy una de las pocas que puede entrar a los barrios, que colabora, que acompaña, porque la gente en los barrios está enojada, la gente en los barrios está triste en Concordia. No hay una salida. Puedo decir que con la tranquilidad de que nosotros la visitamos, que acompañamos, que estamos, que vamos, damos lo que más podemos dar una mano y saben que no le fallamos en eso. Pero sí Concordia necesita un auxilio.
Si escuchás al intendente es una ciudad que no existe o solamente la ve él. Nosotros que hacemos territorio es una realidad muy distinta. Más allá de que la gente votó. Frigerio tiene una buena imagen en Concordia. Rogelio se lo quiere en Concordia y se lo quiere a Milei en Concordia. Entonces, eso fue lo que votó la gente. No hay que confundirse. El intendente nuestro prácticamente no puede salir a los barrios porque no es recibido, pero sí la gente votó lo que es el gobernador y Milei, y bueno, el arrastre llegó a que esto beneficiara hoy al intendente.
—¿Usted ha tenido la posibilidad de reunirse con Ascué alguna vez?
—Sí. Nos hemos reunido muchas veces. Pero si hablás con todos los que somos de Concordia, te vamos a repetir lo mismo. En su momento le dimos una mano inmensa, pero es una persona que no escucha, que toma sus propias decisiones, ojo que está bien, pero no son muchas veces las correctas y hay cosas que uno no las ve. Necesitas del equipo que trabaja al lado tuyo para poder ver todo lo que pasa a tu alrededor.
—¿Se refiere a fallas en cuestiones de estricta gestión municipal?
—Sí, hay muchísimas fallas. Estamos acostumbrados a otra Concordia. Entrabas y el pasto estaba siempre cortado, siempre hubo mucho verde, muchas plantas, recorrías, entrabas por Bolívar y San Lorenzo, todo en el medio, siempre flores. Eso era Concordia y hoy no lo ves. Lo más lindo que tiene Concordia es toda la parte del lago y hoy está destruido. No tenemos prácticamente nada que ofrecerle al turista en Concordia, es muy poco. Por eso también el turista pasa y en un día ve todo lo que tenía que ver y se va. No se queda porque no tenemos mucho para ofrecerlo hoy.



