El pasado 11 de junio, se había llevado a cabo la cuarta audiencia del juicio y – en esa oportunidad - había declarado un perito informático que accedió al celular de Fernando Pastorizzo. El hombre contó que existía un video íntimo de la pareja, aunque no aclaró de qué se trataba.

Ante eso, el abogado de la querella, Juan Carlos Peragallo, pidió que se vaciara la sala y así poder mostrar ese video, con la idea de que quedara articulado el vínculo que unía a los jóvenes. Pero los jueces no aceptaron el pedido y dijeron que en todo caso lo mirarían en la intimidad.

Nahir en ese momento comenzó a llorar. Su llanto fue cada vez más angustiante y fuerte. En un punto del proceso, la joven – ahora condenada – amenazó con suicidarse si el video se viralizaba.

A partir de entonces, el morbo hizo lo suyo en un juicio de alta exposición mediática a nivel nacional. Empezaron a circular videos sexuales falsos en donde se mostraban a chicas que tenían un aspecto parecido al de Galarza, pero ninguna era ella.

El pasado fin de semana, sí se conoció el verdadero. Y la difusión masiva de las imágenes fue casi instantánea.

El hackeo

Durante la tarde de este viernes, personal relacionado al diario El Heraldo confirmó el infortunio en su portal digital y se multiplicaban los esfuerzos para poder subsanar el ataque de los hackers, informó Diario Río Uruguay.