Desde hace varios años la propiedad de este establecimiento está en pugna en ámbitos judiciales y este jueves la Justicia ordenó el desalojo de sus ocupantes, que llevan más de 40 años en el lugar.
Alfredo Bel, delegado de FAA, dijo a Uno que la entidad que integra realizará "todas las negociaciones que sean necesarias para llegar a un acuerdo", debido a que el desalojo se concretó sin tener en cuenta que había actividades productivas en pleno funcionamiento, además de las personas que estaban afincadas allí "desde hace más de 40 años".
"Vamos a tratar de establecer un mecanismo de negociación con la Justicia y con los propietarios del campo, y con todos los que haga falta", manifestó el dirigente agrario, quien describió al desalojo como "una situación extremadamente violenta y extremadamente grotesca".
(Foto: Micrófono Digital)