Ernesto Salum no quiso dramatizar por la derrota de Talleres de Córdoba ante Patronato, por 1 a 0, en la 13ª fecha del Nacional B. Por eso, para el dirigente la actuación del árbitro Sergio Pezzotta en el Presbítero Bartolomé Grella debe quedar en el pasado.
"No hay que llorar. No creo en la mala fe de Pezzotta ni de los jueces", dijo el directivo Albiazul en referencia a algunas jugadas puntuales que habrían perjudicado al elenco cordobés. Entre ellas, un gol anulado por offside y un penal no sancionado a Walter Andrade.
Por otra parte, Salum se refirió a los penales que tuvo Talleres cuando logró el ascenso a la Primera B Nacional jugando en el Torneo Argentino A y recordó que, cuando hubo polémica, en el club se procuró estar tranquilos.
"En aquella época del 'penal para Talleres', mantuvimos la mesura cuando se decía que se equivocaban a favor nuestro", explicó el empresario, en referencia a cómo hay que tomar el momento.
Consultado sobre Pezzotta, no quiso profundizar ni criticar. "Sólo sé que no dirigirá el fin de semana", se limitó a declarar. "Lo que lamento es que el equipo había jugado bien ante Patronato", agregó en declaraciones a Mundo D.