Insaurralde había desaparecido el domingo 18 de octubre de 2009 y tras la denuncia por búsqueda de paradero, se comenzó a investigar y se realizaron distintos rastrillajes. Finalmente, se logra localizar el cuerpo el lunes 26 de ese mes. Se encontraba dentro de un aljibe abandonado, a unos 200 metros de su vivienda de calle Balbín, en la zona del Aeropuerto de Paraná.

Su hermana, María Elena, quien luego de que se encontrara el cuerpo de Gabriel dijo que dejaba todo en manos de Dios y de la justicia por lo que no iba a volver a hacer declaraciones, y así lo hizo; ahora escribió una carta que publicó LT14 y comienza diciendo: “Hace cuatro meses familiares y amigos estamos esperando justicia. Necesitamos saber qué paso. No nos olvidemos que el o los asesinos caminan sueltos por la calle”.

“La vida de los familiares se volvió un calvario, tenemos que armar nuestros pedazos y comenzar un nuevo día, es tan difícil, si supieran cuanto nos vemos en medio de una vida frenada y otra que continúa; pero hay que seguir porque despertamos cada día una pesadilla”, afirmó.

Además, María Elena señaló: “Hay que tener un corazón sano para soportar todas las injusticias, necesitamos saber qué paso y por qué”.

También afirmó: “Gabriel somos tu voz gritando justicia y siempre estaremos a tu lado porque familiares y amigos sabemos bien quién eras”.

Finalmente consideró que Dios es quien los está sosteniendo. “A quienes te quitaron la vida, esa vida que tanto querías, seguramente tendrán la justicia divina. Así será y estaremos aquí siempre esperando una respuesta”, concluyó.