"Hay una situación de emergencia, en perspectiva podemos estar muy preocupados. El norte está complicado: hay animales muertos, la gente no tiene agua para tomar. En el centro-sur de la provincia hay falta de agua para los cultivos: en Rufino el 80 por ciento de la cosecha de maíz está perdido, la zona fuera del círculo Arequito-Casilda está seriamente afectada con pérdidas que van del 20 al 40 por ciento”, detalló Buzzi.
Consultado por La Ocho sobre la crisis en el sector ganadero, indicó que “hay más de 40 plantas frigoríficas paradas como consecuencia de los errores de 2008, cuando se desalentó la producción ganadera, se mataron las vacas y hoy no están los terneros”. De hecho, advirtió: “El productor tiene mayores costos con esta sequía, porque al no haber pastos naturales, se suplementa con rollos, que valen 250 o 300 pesos para que cinco o seis vacas coman un día. Hay fallas en la preñez, hay problemas de producción, hay achique de los rodeos”.
"Las inundaciones son dramáticas y son fotos impactantes, la sequía no tiene espectacularidad pero tiene efectos nocivos para muchos actores de la actividad económica", sentenció.