Para ello, la empresa elaboró un proyecto que consiste en la colocación de defensas en pilotes del muelle, como así también la construcción de una planchada de embarque tipo escala real regulable, que preverá las distintas alturas del río.
También trabajará en nivelación de los pisos en toda la superficie del espigón, con rampas de accesibilidad para personas con capacidades diferentes, el acondicionamiento de todo el lugar con luminarias, la reparación de barandillas perimetrales en el sector y la colocación de una cabina de preembarque.
Luego de conocer las razones, fundamentalmente técnicas y operativas del proyecto, Scelzi hizo hincapié en la necesidad de “trabajar en conjunto el sector privado con el Estado, porque es la forma de llevar adelante alternativas accesibles para todos los ciudadanos”. Además, celebró la propuesta de inversión, ya que son “concientes de que estos emprendimientos son muy importantes para el desarrollo turístico de Paraná”.
En la misma línea, Marsó remarcó la importancia de trabajar en forma conjunta, acompañando la propuesta y las inversiones que se prevén realizar, para lo cual “el Estado debe facilitar lo que se necesite, apostando a este tipo de propuestas que son las que hacen crecer la oferta turística, mejorando la atención a los paranaenses y a los visitantes”.
Por su parte, el secretario de Turismo de Paraná, Carlos Monti, señaló la importancia de trasladar el amarradero al espigón uno de la costanera, ya que esa zona es de gran movimiento los fines de semana, tanto de turistas como de los paranaenses que deseen utilizar este servicio para paseo por el río.
Cabe señalar que el Ministerio de Turismo y el IPPER acordaron seguir avanzando en distintos proyectos a corto y mediano plazos en los diferentes puertos que tiene la provincia de Entre Ríos.