Según reconoció Alba a Diario Río Uruguay, al igual que otras unidades, con el vehículo siniestrado “se hacen muchos kilometrajes, no paran, no se les hace la limpieza y el mantenimiento que corresponde”.
Los maquinistas pudieron salir a tiempo del habitáculo, e incluso extraer “los elementos más costosos” de la cabina de conducción.
En el lugar debió hacerse presente una autobomba del cuerpo de Bomberos Zapadores de la Policía.
Es preciso señalar que, de acuerdo al contrato de Concesión entre el Estado y ALL, la firma brasilera debe hacerse responsable “de la operación de trenes, el mantenimiento del material rodante, e infraestructura, entre otras cosas”.