El entrenador de club Peñarol, Mario Redondo, manifestó su satisfacción por haber obtenido el Torneo Apertura de Primera B al vencer a Don Bosco por 1-0 con gol de Luis Domingo y consagrarse de manera invicta, con lo que se asegura el 50 por ciento del ascenso para el 2005. El otro 50 por ciento se lo adjudicará el ganador del próximo Clausura. Redondo admitió que este Peñarol “es un fenómeno raro”.
Exultante, feliz, con lágrimas en los ojos, así se lo veía a Mario Redondo, DT tricolor, confundido en un abrazo con sus dirigidos y algún que otro hincha que pretendía dar la vuelta olímpica en la cancha ubicada en Italia al final. En total se contaban 700 almas gozando de este título, que viene a remendar la amargura que había povocado el descenso del año pasado a manos de Los Toritos.
Mario Redondo, el ideólogo de este proyecto, dio de muestras de su satisfacción al afirmar que “Peñarol es un fenómeno raro. Gracias al equipo la gente volvió a la cancha y por ello vamos en camino a un cambio”.
Sobre el goleador de la tarde, Luis Domingo –arquero devenido en romperedes-, aseguró lo siguiente: “Luis Domingo es un gran arquero. Él manifestó sentirse culpable por el descenso; hoy tuvo su chance, su revancha y se le dio”.
En sus últimas palabras dejó entrever la imprtante función social que cumplen dándole la oportunidad a muchos jóvenes d insertarse en una actividad deportiva, ya que “logramos una buena contención social y los chicos tuvieron ese premio gracias a ese esfuerzo”.
La frase final final de Redondo apuntó a los próximos objetivos. “El objetivo es clasificar directamente sin tener que disputar finales”, sostuvo.