Tibios, tímidos y desconcertados. Así estuvieron Los Pumas en la revancha ante el combinado galo de Barbarians, que terminó de agravar las dudas en el plantel argentino de cara a la Copa del Mundo cuando el staff deberá nombrar, en los próximos días, los nombres que viajarán a Pensacola, Estados Unidos.
Tal como sucedió el fin de semana pasado, los franceses tuvieron la iniciativa y complicaron por demás a los argentinos. El visitante fue un equipo que propuso juego desde todos los sectores de la cancha y que movió la pelota de lado a lado para buscar espacios en la defensa del local.
De hecho, no sólo los europeos fueron los que movieron el tanteador con un penal de Romain Tuelet, sino que además fueron los artífices de una interesante combinación, con sombrerito incluido, que terminó con Benjamin Lapeyre debajo de los palos. La conversión del full back volvió a poner arriba a los visitantes, ya que anteriormente Nicolás Sánchez había igualado con su pie.
El apertura tucumano, debutante, fue quien mantuvo cerca a los locales. A pesar de algunos destellos, el conjunto de Santiago Phelan se limitó a sumar por intermedio de su pateador, que estuvo certero y dio vuelta la historia con tres envíos a los postes para a su equipo arriba al término de los primeros 40 minutos por 12-10.
Para el complemento, el entrenador argentino decidió mover el banco de suplentes y les dio ruedo desde el arranque a Juan Pablo Orlandi (por Martín Scelzo) y Nicolás Bruzzone (por Alfredo Lalanne); Eduard Coetzee ingresó en la primera línea Barbarian en lugar de Pierre Philippe Lafond.
Al igual que en el tiempo anterior, el combinado francés volvió a tomar el control de las acciones y su pateador, que había fallado dos oportunidades antes del descanso, justificó la performance dejando a los galos arriba por un punto antes de que Sánchez volviera a hacer uso de su efectividad.
Sin embargo, sería nuevamente el desequilibrio de Barbarians por el centro de la cancha con Guillaume Boussés el que pagaría sus réditos después de un kick muy bien colocado por Teulet a la carrera de Lapeyre para que éste consiguiera el segundo try de la tarde.
El conjunto visitante basó su juego a partir de la obtención en el line out, una formación donde Los Pumas se complicaron y tuvieron, además, errores no forzados que le facilitaron la tarea al adversario.
Ya en el tramo final, Barbarians cerró el juego, controló la posesión y dejó pasar los minutos con la chapa a su favor. Y aunque la Argentina recuperó la pelota e intentó avanzar sobre la defensa rival, los movimientos fueron muy tímidos y la gente que se acercó al estadio terminó aplaudiendo de pie al combinado francés que se tuvo una merecida revancha en Chaco.
Terminaron los exámenes y, ahora sí, los entrenadores deberán empezar a sacar conclusiones de la producción argentina en pos de conformar el plantel que se preparará, al igual que en la previa de Francia 2007, en Pensacola.