Al cumplirse este domingo un año del levantamiento del corte de la Ruta Internacional 136, a la altura de Arroyo Verde, la Asamblea Ambiental se reunió en ese paraje histórico y emblemático de su lucha para seguir protestando.

El refugio quedó pequeño para albergar a los vecinos que se acercaron al promediar la tarde y la reunión -que fue informativa y no resolutiva- se realizó con una gran concurrencia, al punto que el espacio quedó insuficiente y muchos siguieron las alternativas de pie. Minutos antes de las 16.30 el asambleísta Miguel Ángel Lemes, leyó el comunicado de prensa y ese documento se recepcionó a manera de proclama, publicó El Argentino.

Luego, varios asambleístas hicieron uso de la palabra, destacándose las intervenciones de Martín Alazard, Juan Veronessi, Oscar Bargas, Orlando Piaggio y Jorge Fritzler, para nombrar a alguno de ellos. Las críticas fueron todas coincidentes en señalar la complicidad de los gobiernos de Argentina y Uruguay para avalar al enclave colonial de Botnia-UPM.

En ese marco, muchos hicieron observar que mientras la causa judicial que promueve la Asamblea en el Juzgado Federal de Concepción del Uruguay está paralizada, las que se llevan adelante criminalizando la protesta va en avión. Simultáneamente a la reunión en el refugio de Arroyo Verde, otro grupo de vecinos entregaba volantes a los automovilistas que pasaban por el kilómetro 28 de la ruta internacional 136.

Los asambleístas criticaron al gobierno nacional por buscar la “resignación” y el “cansancio” de quienes reclaman contra la pastera UPM y de “claudicar” en sus exigencias a Uruguay para evitar la “contaminación” de la planta. Otra crítica que se expresó estuvo relacionada que a pesar de haberse verificado “la ilegalidad (de Botnia), estamos peor que antes: se vigila menos a Botnia, no se informa y se claudica en los reclamos frente a la República Oriental del Uruguay”.

Por otra parte, en el documento leído -y que lleva por título “A un año, con las manos vacías”, los asambleístas reiteraron su denuncia contra “Botnia-UPM porque sigue funcionando y generando más contaminación”.

Por eso, ayer en Arroyo Verde se volvió a lamentar la “situación de desamparo e indefensión” de la comunidad porque “las autoridades gubernamentales, por acción u omisión, aparecen en general más preocupadas por garantizar la inversión de una empresa ilegal que la salud de los propios vecinos y la sustentabilidad” de sus recursos.

Además, reiteraron su repudio a los procesos judiciales de los que están siendo objeto los asambleístas a raíz de los cortes de ruta. En ese sentido, se contrapuso la actitud de la “representación estatal” que, dijo, “en lugar de colectar pruebas contra Botnia se ha encargado sistemáticamente de profundizar la persecución de quienes se han limitado a reclamar en forma pacífica por algo que ha sido declarado ilegal y que el Estado afirmó que contaminaba, según surge de la presentación ante La Haya”.

La Asamblea recordó que hace un año se levantó el largo corte de ruta porque el Gobierno dijo que era “el escollo principal” para activar las negociaciones con el gobierno uruguayo y poder cumplimentar en forma inmediata el fallo de La Haya. Pero, de la misma forma y pese al tiempo transcurrido, el gobierno jamás cumplió con la palabra dada al pueblo de Gualeguaychú.