En un partido con momentos de mucha desnaturalización por el flojo arbitraje, Argentina venció a Chile por 2-1. Sergio Agüero y Paulo Dybala anotaron para la Albiceleste, mientras que Arturo Vidal, de penal, anotó el descuento. Los argentinos finalizaron terceros.

La selección argentina de fútbol logró sacar cara en el partido ante Chile y pudo finalmente derrotarlo en un partido definitorio. Fue en el marco del juego por el tercer puesto de la Copa América, jugando en el Arena Corinthians de San Pablo, en un partido sumamente desnaturalizado por el arbitraje.

Los dirigidos por Lionel Scaloni salieron dispuestos a aprovechar cualquier resquicio en el fondo de su rival. Argentina cedió la pelota en los primeros minutos y jugó con las pérdidas del mediocampo chileno, que se equivocó dos veces y lo pagó. En la primera fue una falta mal cobrada por el árbitro Mario Díaz de Vivar que Lionel Messi jugó rápido para Sergio Agüero. El Kün picó en gran manera haciendo una diagonal que dejó desairado a Gabriel Arias y, con el arco libre, el delantero del Manchester City marcó el 1-0 a los 12.

Apenas 10 minutos más tarde, ya con Argentina teniendo un poco más la pelota, un pase filtrado por la izquierda encontró a Paulo Dybala, cuyo control orientado y posterior corrida dentro del área rival dejó sin chances a Arias, a quien le picó la pelota contra un palo. Fue así que anotó el 2-0 que parecía establecer que el partido tendría a Argentina como amplio dominador.

En los siguientes minutos el juego se fue emparejando, aunque siempre quedó la sensación de que los argentinos tenían el dominio esencial del partido. No obstante, a los 37 llegó la jugada que marcó el futuro del partido. En una pelota que se fue larga y se escapó por el fondo de la cancha, Messi empujó a Gary Medel y generó la reacción del chileno, que lo cuerpeó en tres oportunidades, el árbitro llegó y su decisión fue expulsar a ambos futbolistas, cuando dio la sensación de que debió haber sido una amonestación para cada uno -Medel ya tenía amarilla-.

Con ambos equipos con un jugador menos, el partido sufrió una tremenda desnaturalización y consumió sus últimos instantes con los jugadores muy nerviosos dentro del campo de juego.

En el complemento, Argentina propuso lo mismo que en los primeros instantes del partido, que recibió una nueva sorpresa en esta etapa. A los 14 de la segunda parte, por medio del VAR, el árbitro sancionó penal de manera correcta por la falta de Lo Celso sobre Gabriel Vargas -en la contra Argentina casi anota el tercero- y con una excelente ejecución, Arturo Vidal puso el 1-2 que daba esperanzas a Chile.

En los siguientes instantes buscó el equipo chileno ante una breve merma en el nivel de la Argentina. Así fue que Vargas tuvo una clara con un remate que encontró muy bien parado a Franco Armani, en su única intervención del partido.

Antes de salir, Agüero contó con dos chances que pudieron haber sido el tercero, pero las desaprovechó. La primera fue tras una gran corrida de Ángel Di María, aunque su remate dio en la cara de Arias; mientras que en su segunda chance, entrando por izquierda, remató cruzado y la pelota se fue desviada ante la volada de Arias.

Poco más hubo para destacar en el partido, que Argentina ganó merecidamente por 2-1 para quedarse con el tercer lugar de la Copa América. El ciclo comenzó complicado y poco a poco el plantel consiguió sostener una idea de juego con la que llegó al último partido jugando su mejor cotejo del certamen.