La jueza en lo Contencioso Administrativo Federal María Alejandra Biotti se declaró competente y es inminente que decida sobre la acción de amparo que presentó el senador Luis Juez (Pro) para ser designado en el Consejo de la Magistratura e impedir que asume en su lugar el senador del Frente de Todos, Martín Doñate, a quien el kirchnerismo designó como representante de la segunda minoría de la Cámara alta.

La jueza inicialmente se había declarado incompetente y había enviado el caso a su colega Pablo Cayssials, que intervino en la causa donde la Corte Suprema de Justicia anuló la postulación de Doñate tras considerar que Cristina Kirchner había hecho trampa al dividir su bloque para quedarse con tres de los cuatro consejeros senadores: dos por el bloque mayoritario y un tercero por la segunda minoría.

El juez Cayssials entendió que no le correspondía intervenir porque su causa ya estaba finalizada con el fallo de la Corte y le devolvió la causa a Biotti. Así, la jueza hoy decidió hacerse cargo del caso, aun dejando a salvo su punto de vista de que no le correspondía hacerlo.

Biotti sostuvo que “se produciría una inevitable demora en la tramitación del expediente que podría irrogar un claro perjuicio al derecho de defensa de los litigantes y al adecuado servicio de justicia, lo cual no resulta aceptable, máxime en una cuestión de trascendencia institucional como la de autos”.

Por eso, asumió el expediente y dispuso habilitar días y horas inhábiles. Es decir, que puede decidir en cualquier momento, no solo en días laborales y horario judicial.

La Corte está pendiente de un fallo en este amparo, ya que mantiene en suspenso la jura de todos los consejeros senadores con el argumento de que la designación de Doñate fue impugnada. Mientras tanto, el máximo tribunal decidió, sin fecha, tomarle juramento a los consejeros diputados: Vanesa Siley y Rodolfo Tailhade, del Frente de Todos, por la mayoría; Álvaro González, de Pro, por la primera minoría; y Roxana Reyes, de la UCR, por la segunda minoría.

Pero surgió otro conflicto judicial, ya que el titular del bloque de diputados del Frente de Todos, Germán Martínez, había presentado un amparo para impedir la asunción de Reyes para el mandato que la santacruceña cumplió en octubre. Alegó que pertenecía a la misma mayoría que Álvaro González, de Pro. Es decir, argumentó que Juntos por el Cambio hizo trampa. La misma que la Corte le adjudica al Frente de Todos en el Senado.

El juez en lo Contencioso Administrativo Martín Cormick anuló la designación para el Consejo de la radical Reyes (para el período ya vencido) y dijo que no correspondía asignarle a ella una banca cuando Pro, aliado a su partido, ya tiene una. Ante esa decisión judicial, quedó congelada también por ahora la jura de los nuevos mandatos de los diputados consejeros.

Tras el fallo del juez Martín Cormick, por el cual se expresó contrario a la designación de la diputada radical Roxana Reyes en el Consejo de la Magistratura, el bloque de diputados de la UCR presentó una nota a la presidenta de la Cámara baja, Cecilia Moreau, para requerirle que apele dicha resolución. La nota fue firmada por el presidente de la bancada, Mario Negri, y por la diputada Reyes.

“Al ser esta Cámara de Diputados el sujeto pasivo de la sentencia en cuestión confiamos en que en su condición de presidenta del cuerpo y, especialmente, en el rol que le atribuye el artículo 42 del Reglamento, interponga el correspondiente recurso de apelación a los fines de no consentir tan grave e ilegal determinación judicial por el gravamen que ocasiona no solo a este bloque y a la diputada Roxana Reyes, sino a la Cámara en su conjunto”, reclamaron los diputados radicales.

Desde el oficialismo anticiparon que Moreau realizará la apelación correspondiente, tal como planteó la UCR. “Es lo que corresponde en defensa de las atribuciones del cuerpo”, indicaron.

(La Nación)