
El entrerriano Paolo Goltz se perderá el debut de Boca en la Copa Libertadores. El defensor nacido en Hasenkamp padece una sinovitis postraumática en la rodilla izquierda que le impedirá jugar este jueves frente a Alianza Lima, en el estadio Nacional de la capital peruana.
No obstante, la ausencia de Goltz no será la única en la zaga del Xeneize, ya que tampoco pudo viajar con la delegación Lisandro Magallán, su compañero en la dupla central.
El DT Guillermo Barros Schelotto decidió esperar hasta la última práctica, que se llevó a cabo este miércoles en el Complejo Pedro Pompilio. De hecho, Magallán aseguraba públicamente hasta el martes que estaba en condiciones de jugar. Ahora las cosas cambiaron: las distintas molestias que arrastran ambos defensores -y que vienen desde el encuentro ante San Martín de San Juan del último fin de semana- le dieron la pauta al cuerpo técnico y médico que lo más conveniente es que se quedaran recuperándose en Buenos Aires.
El parte médico oficial diagnosticó una sinovitis postraumática en la rodilla izquierda del entrerriano Goltz, mientras que el ex defensor de Defensa y Justicia padece una contractura en el recto anterior izquierdo, consigna La Nación.
Bajas sensibles si las hay: se especulaba que sería el ex hombre de Lanús el que probablemente se ausentaría, pero Boca ingresará en la cancha sin ninguno de los dos, piezas que adquirieron importancia más allá del rendimiento actual de uno u otro. La defensa, junto con los laterales Jara y Fabra, estaba consolidada: apenas recibieron ocho goles en 17 partidos. Estadística de peso que ahora Barros Schelotto intentará conservar mediante una serie de movimientos que cambian toda la planificación.