El ex diputado nacional y ex intendente de Concepción del Uruguay, Juan Carlos Lucio Godoy, analizó el contexto político y económico del país ante las últimas medidas del gobierno nacional tras los resultados electorales de las PASO, y de cara a las generales de octubre.  

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Godoy admitió sentirse “con angustia y muy preocupado” por la realidad económica del país y analizó que “este cimbronazo que está pasando Argentina tiene que ver con una sociedad que en el mundo va cambiando porque se pone más insatisfecha y mucho más ansiosa”.

Consideró que “es mucho tiempo” cuatro meses entre las PASO y la entrega del mando porque “genera incertidumbre y eso a su vez genera en distintas personas, distintas actitudes” y si bien acordó que esto está establecido en la Constitución, planteó que “estos tiempos que corren en el mundo y Argentina son diferentes a los tiempos de cuando se votó la Constitución, que eran tiempos de una estabilidad en el pensamiento, en las formas económicas y políticas que hoy no existe”. En contraposición, marcó que “hoy no hay bipartidismo, nadie sabe quién tiene el poder de un lado o del otro y eso genera incertidumbre que esta reflejándose claramente en los mercados”.

En este marco, planteó que “si va a ser larga la transición como son estos cuatro meses, lo menos que tienen que hacer es tener una convivencia de diálogo entre el ganador y quien salió derrotado, que en este caso está en el gobierno”. “Tenemos que alimentar con democracia y con diálogo el proceso de transición. Si en sí misma la transición genera desequilibrio, o lo que se llama un equilibrio inestable, la obligación que tienen los distintos dirigentes de la sociedad es el diálogo”, explicitó.

“Conozco de muchos años a Alberto Fernández, tenemos muy buena relación y lo respeto mucho, sé que es una persona que tiene talento y es inteligente como para pensar, para hablar – aunque a veces se le escapan algunos términos que no son convenientes- pero cuando él dice no soy presidente y la responsabilidad está en el gobierno, está cometiendo un yerro político que no corresponde, porque hoy en día la gran mayoría de la sociedad argentina considera que él puede ser presidente y su opinión tiene un valor inconmensurable, y cualquier palabra que diga produce efectos positivos o negativos en la sociedad”, reflexionó Godoy.

En tal sentido, opinó que “se está haciendo mucho énfasis en eso, en que la culpa es del gobierno y del Fondo cuando en realidad el gobierno que viene, suponiendo que es Alberto Fernández, va a continuar y a heredar toda esta problemática económica y financiera que está viviendo el país”. “Por eso hay que tener una propensión el diálogo constructivo para la etapa que viene, y en eso también tiene que contribuir el actual presidente, para dejar una sucesión que sea manejable; que se muestre algo distinto a lo que pasó entre (Raúl) Alfonsín y (Carlos) Menem, que no sea una hecatombe, que sea un proceso normal, que nos haga ver como un país normal ante el mundo, y que sepamos resolver los problemas que se presentan de la mejor manera posible”, definió.

Ante ello, afirmó que “el problema argentino no reside en la estructura productiva, que viene con la historia, no reside en quién gobierna, sino en cómo hacemos el proceso que pasa de un gobierno al otro”.

En este marco, consideró que “la mayoría está dispuesto al diálogo y los que quieren que estalle son muy pocos, aunque es posible que tengan mucho poder político. Fernández no tiene todo el poder político, porque ni siquiera tiene un legislador, pero sí hay poder de la palabra, de convocar a los medios y que escuchen a la persona que posiblemente va a presidir el país”. “Además hay que tener en cuenta que todavía no fueron elegidos los diputados y senadores que van a constituir el parlamento argentino a partir del 10 de diciembre, inexorablemente hay que elegir a los futuros gobernantes del Poder Legislativo y del poder ejecutivo, no se pueden saltear etapas”, sentenció.

Los anuncios de Lacunza

Consultado por las medidas que anunció el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, en la tarde del miércoles, Godoy consideró que “hay una coincidencia plena entre la postura del gobierno y la de Alberto Fernández porque le había escuchado al candidato del justicialismo que había que renegociar con el Fondo”.

“Ese reperfilamiento de la deuda que se anunció tendría anuencia del Fondo y además va una ley al Congreso, es decir que se está haciendo algo prudente, para que el Congreso apruebe o no esta reprogramación de deuda; lo cual le va a hacer muy bien al gobierno que viene. Esto es mucho más positivo para todos: para el gobierno que está, para la transición y para el gobierno que viene”, definió.

Sobre los efectos que podrían tener los anuncios sobre los mercados, dijo que “pareciera que habría anuencia del Fondo y es posible que se haya hablado con el Fondo antes de sacar esta medida, y si así fuera habría calma en los mercados, porque leí que el dólar bajó después de los anuncios de Lacunza y eso sería una buena señal”. “Este es un problema de cotización del dólar y de confianza; acá la preocupación es cómo defendemos la cotización del dólar, que no se vayan las reservas y que se pueda pagar a más largo plazo las deudas”, resumió.

En cuanto a los reclamos de las provincias ante la Corte Suprema, sostuvo que “lo de los gobernadores es una sobreactuación, porque resulta que ahora hay un desfinanciamiento de las provincias si se baja el IVA pero la propuesta de Fernández era bajar el IVA a los productos esenciales”. “Más que una sobreactuación es una contradicción, porque estoy de acuerdo que hay una afectación al presupuesto de las provincias pero también se aumentó un 10% la coparticipación federal en los últimos tres años, esto es decir vamos a contribuir entre todos al problema de la Argentina”, aseveró.

“La responsabilidad es de todos para resolver el problema, no es de uno solo. Se le pide al gobierno nacional que resuelva los problemas pero sin tocar la plata de nadie, y cómo se hace eso? A esto lo resolvemos entre todos o no lo resuelve nadie, es una verdad absoluta y estoy de acuerdo en que los gobernadores tienen que hacer su demanda como su obligación; pero también hay que entender desde el punto de vista político que todos tenemos que aportar”, concluyó.