“No vamos a aceptar retroceder en las conquistas, como mantener el poder adquisitivo de un salario digno”, subrayó Moyano, y rechazó nuevamente que “algunos intenten poner topes a los porcentajes” que se discutirán en las paritarias el año que viene.
“Alguna vez tiene que salir de las filas del trabajo alguien que conduzca los destinos del país”, insistió, en una fórmula que ya le valió la respuesta de la Presidenta en el acto por el 17 de Octubre del año pasado en la cancha de River. De todas maneras, aclaró que se sentía “viejo” para ser candidato en el 2015 y agregó que le quedaba “grande el saco” para ser un Lula da Silva argentino, según reprodujo Página 12.
El diálogo en los últimos tiempos fue escaso entre ambos sectores, aunque por otros canales nunca se cortó la comunicación. En estos días, y después del acto del Día del Camionero, cuando Moyano criticó al Gobierno como no lo había hecho antes, se está intentando restablecer los lazos.
“Se tiene que poder negociar las dos cosas, estamos esperando que se destrabe la negociación”, señaló una fuente gremial, aludiendo a la suba del mínimo no imponible y también al proyecto de ley para repartir parte de las ganancias de las empresas entre los trabajadores –propuesta que la Presidenta desestimó frente a los empresarios de la Unión Industrial Argentina–.