El titular de la Jefatura Departamental de Policía precisó que aproximadamente a las 14.30 de este miércoles, “tomamos conocimiento en el Comando Radioeléctrico que se estaba cometiendo un ilícito contra la propiedad en calle Roque Sáenz al 400”, y cuando los efectivos llegaron al domicilio se encontraron “con la puerta abierta y los gritos de auxilio de una persona”.

Y agregó en diálogo con Diario Río Uruguay: “Inmediatamente se ingresa al lugar y se detecta a un masculino que intenta evadir la intervención huyendo por el fondo, por lo que hay una persecución por los techos de la manzana, hasta que se lo detiene sobre calle Presbítero del Castillo”.

La sorpresa de los uniformados fue mayúscula cuando se dan cuenta que el ladrón “resultó ser la misma persona que ayer al mediodía había intentado cometer un delito contra la catedral local” y que luego de la intervención de la Justicia recuperó la libertad casi 24 horas después.

Lo impactante es que pasaron menos de dos horas “y este hombre procedió a cometer este otro hecho de muchísima mayor gravedad, ya que (además de haber robado unas pocas cosas) golpeó con cizaña a una mujer de 83 años”, destacó Mendoza.

Posteriormente, la señora detalló que el delincuente la golpeó en el rostro, provocándole un corte sobre el arco superficial derecho e inclusive la amordazo para que no pueda efectuar gritos, mientras la trasladaba de una pieza a otra para que le indicara donde encontrar dinero o elementos de valor. Como botín, el delincuente escapaba con 50 pesos en efectivo, una cámara de fotos y algunos anillos de la propietaria.

Asimismo, se conoció que dos días antes de haber sido detenido en el interior de la Catedral de Concordia, este malhechor había sido detenido por una contravención en la vía pública.