Se cumplió ayer la segunda jornada de audiencia por la presunta comisión del delito de “Incendio Seguido de muerte”, en la que se encuentra como único imputado Carlos Daniel León, entrerriano, de 25 años de edad. A León se lo acusa de haber sido el responsable de dar inicio al incendio que, en la madrugada del 19 de enero, destruyera las instalaciones del hospedaje “5 de Octubre” y acabara con la vida de Paola Alejandra Monachessi y Ciro Arsenio Ibarola –de 19 y 62 años, respectivamente. La situación del único imputado no se habría visto comprometida por los testigos, restando aún varios testimonios por escuchar. Un amigo de infancia de Carlos Daniel León refirió que “en el barrio (en su provincia natal de Entre Ríos) lo quieren todos”.
Cuatro testigos aportaron, en la víspera, sus testimonios frente al Tribunal aportando distintos aspectos de lo sucedido en horas previas al fatal siniestro. El primero en ser sentado frente a los estrados fue Pablo Emanuel Escales, quien manifestó residir en Río Grande “desde hace cinco años” y ser “amigo” de León “desde los once años”. La situación de profunda amistad con el imputado, por momentos le provocó silencios, aunque ante las preguntas del Fiscal Giménez y de los miembros del Tribunal, accedió a responder sin marcar contradicciones con su anterior exposición.
Cuando a Escales le solicitaron que definiera la personalidad del imputado, éste refirió que “en el barrio (en Entre Ríos) lo quieren todos”. Pablo Escales recordó que en la jornada previa habían llegado a la casa de Sergio Gorosito junto con su hermano (Raúl Escales) y otro amigo llamado Ricardo, y que allí se encontraban Carlos Daniel León, Diego Armando Céspedes (hermano de Sergio), el papá de Sergio, y otros jóvenes –dos mujeres y un varón-. Que jugaron en una Play Station, tomando unos vinos y cervezas, y que estuvieron hasta cerca de las 2 de la madrugada.
Sobre la presunta discusión previa, entre el imputado y su hermano (con quién León compartía la habitación del hospedaje), Pablo Escales respondió que “hubo una discusión ‘entre todos’ por el juego”.
Más adelante refirió que “el padre de Sergio (Gorosito) nos pidió que nos vayamos porque estábamos haciendo mucho ruido, estábamos gritando y ya era muy tarde”, agregando “(Daniel) después discutió con mi hermano, yo estaba adentro, no sé lo que pasó afuera” acotando “León se fue enojado”.
Ante la pregunta del Fiscal si hubo algún intercambio de golpes, expresó “me parece que sí, porque, si salieron afuera” e hizo un profundo silencio que dejó sentada la duda sobre lo ocurrido.
Luego recordó que un grupo –en el que él se encontraba- se dirigió a la casa de Sergio Gorosito. Por último, desde el Tribunal se le preguntó al testigo sobre los acontecimientos que se ventilan en la causa 268/05, respondiendo que “nos avisaron por celular que se estaba incendiando el hospedaje, y nos fuimos al hospital, primero nos dijeron que ni mi hermano (Raúl) ni Daniel (León) estaban ahí. Después, un policía que estaba en la guardia, nos dijo que Daniel estaba detenido por contraventor”.
Una de las indumentarias con que, los testigos de la fatídica madrugada, habían dicho ver al presunto sospechoso era una gorra con visera, lo que no fue recordado por Escales, quien aseguró que “en Entre Ríos no las usaba”.
Según informa Provincia 23, el segundo testigo en declarar fue Diego Armando Céspedes quien relató haber conocido al imputado “el 24 de diciembre del año pasado, cuando llegó”. Céspedes coincidió en que se encontraban en la casa de su madre, jugando con la ‘Play’ y “haciendo mucho ruido” y que como su mamá y su padrastro debían levantarse temprano, para ir a trabajar, “mi hermano se enojó y dijo que nos fuéramos porque estábamos haciendo mucho ruido”, y que “León dijo que se iba para el barrio Austral”.
En este punto, el Fiscal Giménez le recordó que, en su declaración del 19 de enero había dicho que “se generó una discusión en la que se le decía a ‘Mieli’ (León) que era un perdedor”, y que “León estaba muy borracho”, lo que no pudo asegurar, repitiendo “León agarró por la calle Perón y se fue para el Austral”.
A su turno, Sergio Edgardo Gorosito ratificó todo lo dicho por sus antecesores, aunque refirió que cuando todos se fueron él se quedó en la casa.
Cuando le consultaron sobre el presunto altercado, Gorosito recordó que “me dijeron que hubo una discusión y que algunos se fueron para un lado y otros para otro lado”.
Preguntado sobre el incendio y la posible autoría de León, el testigo relató “no lo podíamos creer, porque él era bueno, hablaba, no era de pelear, y tampoco de hacer bromas pesadas”.
Por último, Hugo Páez dueño de la casilla de Margen Sur, donde León habría incinerado indumentaria, refirió que no pudo reconocer a la persona que habría visto caminando.
En este punto se presentaron algunas diferencias con las actuaciones policiales donde se habría hecho constar que Páez lo había identificado en forma positiva. La audiencia se reanudará a partir de las 11 de hoy, con la toma de varios testimonios más, y la incorporación por lectura de algunos otros.