“Chausovsky expuso en esa oportunidad -junto a las abogadas Eva Senkman y María José Acquaviva- como parte del equipo de la Cátedra Derecho de la Extranjería de la Facultad de Derechos y Ciencias Jurídicas de la Universidad Nacional del Litoral (UNL). Además de ese participación puntual, brindó el asesoramiento constante a esta Defensoría en cuestiones relacionadas a la migración, la normativa aplicable y a las instituciones involucradas en el tema; todo desde la perspectiva fundada en la convicción de que el traslado de las personas de una región a otra o de un país a otro es un derecho humano”, reflejó la institución.
“`Ningún ser humano es ilegal’ era una de sus frases de cabecera”, rememoraron los defensores titular, Luis Garay, y adjunto, Pablo Donadío, al dar cuenta de una de las ideas que marcaron su pensamiento, que cobra especial relevancia por estas horas de violencia y muertes en Villa Soldati.
“Entre sus acciones, se destacaron con motivo de su fallecimiento –y esta Defensoría hace lo propio- su oposición casi solitaria a las denominadas leyes de Obediencia Debida y Punto Final, su dedicación -como magistrado- al estudio y al trabajo y su compromiso con los valores e invalorable aporte al Derecho de la Extranjería”, finalizó el organismo.