En una entrevista Martín Ponte trazó una especie de balance de lo que fue su temporada en la categoría más convocante del automovilismo argentino. En el inicio hizo referencia a la última fecha y a la sanción que sufrió después de finalizada la segunda serie: “¡Qué injusto mi recargo por Dios! Si sos de la Copa de Oro podés hacer cualquier cosa y si no estás entre esos 12, ¿los tenés que dejar pasar?”, interrogó en sus declaraciones.
Es que Ponte fue recargado en la batería al considerar los comisarios deportivos que barrió la pista en perjuicio del marplatense, Christian Ledesma, en ese momento uno de los pilotos candidatos a la corona.
Esa sanción motivó que cayera del tercer al quinto lugar en esa serie y consecuentemente se vio perjudicado en la ubicación de largada de la final, en la que arrancó 17º y terminó 14º en un trazado de los considerados difíciles para efectuar sobrepasos.
En relación a la competencia en sí, analizó que “no fue buena la carrera, fui injustamente sancionado en la serie y en la final rompí la carga de la trompa y me costaba mucho avanzar”.
Por otra parte, y tras considerar que en el campeonato terminado quedó pendiente conseguir una victoria, Ponte sostuvo que de todas maneras “cerramos un buen año y pintaremos el 11 en el 2013”.
Y enseguida agregó que “para 2014 sería lindo despegarle un uno”, en clara alusión a sus aspiraciones de consagrarse como el mejor.
Finalmente agradeció a todos los aficionados y simpatizantes “por los saludos y las demostraciones de cariño, de este fin de semana y de todo el año”.
En 2013, Ponte continuará con el Torino del equipo Argentina Racing, el cual seguirá contando con la asistencia de Maximiliano Juárez y con la motorización de Eduardo Alonso.