“Para dar una cifra que magnifica el escándalo de subsidios que han recibido estas empresas, podemos decir que TBA (Trenes Buenos Aires) concesionaria del Ferrocarril Sarmiento, recibió en los últimos tres años más de 420 millones de subsidios, superando los 1.000 millones en los últimos diez años para una sola empresa”, graficó el diputado.
Y continuó: "A ésta situación de desinversión y falta de mantenimiento de vías, de coches, de mayores frecuencias, hay que sumarle una conflictividad gremial que el Estado ha ido potenciando, toda vez que no ha permitido el reconocimiento de organizaciones gremiales que legítimamente lo merecen, por el sólo hecho de apañar a la burocracia gremial".
“Párrafo aparte merece la tercerización de servicios de muy mala calidad, que luego de la privatización quedaron en mano de la dirigencia gremial, que se convirtió en patrón y obrero a la misma vez”, indicó en declaraciones reproducidas por Página Política.
A su vez, manifestó: "Lo que vengo sosteniendo es la necesidad de retomar el concepto de transporte público y de recomponer el transporte de carga”. Y se comprometió: “Este es el desafío que vamos a plantear en el Congreso una vez que comience el período de sesiones”.