Según Eléspuru, los tamberos deberían estar cobrando no menos de 1,70 pesos el litro. Si bien el último precio informado por el Ministerio de Agricultura, correspondiente a noviembre pasado, da como valor promedio 1,48 pesos el litro, para el dirigente hay productores cobrando varios centavos menos de esa cifra.
Miguel Paulón, presidente del Centro de la Industria Lechera (CIL), prefirió no opinar hasta que la próxima semana se reúna en Agricultura una comisión técnica conjunta de tamberos y empresarios. "No conviene adelantarnos por los medios", precisó.
En este contexto, la Federación Agraria Argentina (FAA) resolvió pedirle al ministro de Agricultura, Norberto Yauhar, y al subsecretario de Lechería, Arturo Videla, una audiencia para tratar lo que considera una "desesperante situación de los pequeños y medianos productores tamberos".
Según la FAA, a la falta de rentabilidad de los tamberos se suma la sequía que, en su opinión, obligará a productores a abandonar la actividad.
Vale recordar que en noviembre pasado los tamberos agrupados en FAA, junto con otras entidades del sector, le pidieron una audiencia a la presidenta Cristina Kirchner, que nunca les respondió.
Argumentos
Para los tamberos, las industrias tienen un alto nivel de ventas en el mercado interno y exportaciones que permiten que puedan pagarles más.
Sólo en el rubro leche en polvo, en los primeros once meses de 2011 las empresas lograron exportar un 40 por ciento más en volumen (207.491 toneladas) y 62 por ciento en valor (835 millones de dólares), versus igual período de 2010.
En tanto, en quesos colocaron en el exterior 23 por ciento más en volumen (55.096 toneladas) y 37 por ciento en valor (251,8 millones de dólares) respecto del mismo lapso de 2010.
"No es mucho lo que pedimos en función de lo que las empresas están exportando y vendiendo en el mercado interno", apuntó Eléspuru.
En 2011, la producción de leche a nivel país creció un 14 por ciento y superó los 11.000 millones de litros, un valor récord.
Eléspuru se lamentó de que, pese al logro de esa meta, la industria no recompusiera los precios a los productores.
"Estamos en un mar de leche y no les importa bajarnos los precios", dijo. Para el dirigente, la sequía va a encarecer los costos de alimentación y pondrá a muchos productores "en quebranto", publicó La Nación.