En Paraná hay dos clubes de campo, tres countries y varios más barrios residenciales y/o condominios. El cuadrado imaginario que se puede trazar entre la Toma Vieja, el Acceso Norte y el Río Paraná es un fiel ejemplo: un gran porcentaje de los terrenos ubicados en esa zona está loteado a la espera de la inversión en vivienda de la ciudadanía.
Justamente por esa zona se encuentran dos de los emprendimientos inmobiliarios más grandes: Santa Cándida y Puerto Barrancas. Estos dos, como el resto de los barrios privados cuentan con espacios comunes a los vecinos, gimnasios, spa y otros servicios que van variando según el proyecto.
Santa Cándida, a pocas cuadras del Acceso Norte
Sobre calle López Jordan se ubica uno de los primeros barrios privados de la capital provincial. Santa Cándida se montó sobre terrenos que la familia Uranga adquirió en la década del 30. El proyecto se pensó en varias etapas pero sólo pudo concluirse una, al menos de la manera que se pensó originalmente.
El terreno completo tiene 27 hectareas, pero el desarrollo que se puede observar habitado sólo alcanza a cinco hectareas del total. Allí hay 23 casas construidas y otras 6 en proceso de construcción, mietras que los 40 terrenos que hay en ese loteo ya fueron vendidos. Comprar una casa en Santa Cándida cuesta alrededor de 490 dólares.
La segunda etapa del proyecto se había pensado para 2012, pero la prohibición de nuevas construcciones de estas características impidió el desarrollo bajo la idea original.
Puerto Barrancas, 100 hectáreas de monte y playa privada
En la parte trasera del camping de la Toma Vieja hay una rotonda grande que comunica con calle Pintor Alfredo Nux. Dicha arteria era uno de los caminos que los ciudadanos aventureros o pescadores tomaban para poder disfrutar del monte al costado del río Paraná. Sin embargo, hoy esa calle está cerrada por una tranquera y el cartel que dice "Propiedad Privada".
A partir de ahí comienzan las más de 100 hectáreas de Puerto Barrancas, club de campo que cuenta con 596 lotes de los cuales los más chicos tienen 400 metros cuadrados. Además del salón de usos múltiples, este proyecto original prevé la instalación de un restaurante, pileta climatizada y se piensa en un futuro centro comercial. Pero este proyecto tiene una característica distinta al resto: tiene una playa privada, ubicada hacia el noreste camino a Villa Urquiza si vas por el río. Es algo prohibido por la propia constitución, los caminos costeros son propiedad de todos los ciudadanos. En la propia playa, el emprendimiento cuenta con bajada de lancha, prevén una guardería para embarcaciones y cuentan con otra pileta para poder utilizarla en verano.
Allí, un terreno de 800 metros cuadrados puede conseguirse por 30 mil dólares, aunque según su ubicación -más cerca o lejos del río, por ejemplo- puede variar el precio y llevarlo hasta 80 mil dólares. En estos momentos hay alrededor de 20 propiedades instaladas.
Amarras del Sol, de una playa para todos a un barrio para pocos
El más polémico de los proyectos es el del empresario Liftchitz. Se trata de Amarras del Sol, barrio privado montado sobre el viejo y popular balneario de Los Arenales. El muro divide lo público de lo que supo ser público y en ese terreno se montaron 61 lotes de los cuales sólo se ven ocho construcciones, algunas de ellas sin terminar. Sin lugar a dudas, de las construcciones se destaca una gran mansión blanca ubicada en el mejor lugar del loteo.
Lifchitz adquirió el terreno en un remate público, a precio vil, que realizó el Banco Municipal. El proceso de compra fue avalado por la Justicia entrerriana, a pesar del enojo de la ciudadanía que fue rehén de los vínculos de la política con los empresarios. Ese teje y maneje tuvo como consecuecia que el mejor balneario que había en Paraná, al cual asistían centeneraes de ciudadanos, pase a ser un emprendimiento privado para pocas familias privilegiadas. A modo de ejemplo: la vieja laguna del balneario se tranformó en un atracadero de cruceros de lujo.
La promesa del empresario de llevarle servicios a todo el barrio Los Arenales, ubicado al lado del barrio privado, quedó a medias: no todo el barrio tiene luz, agua y cloacas. Esto quedó demostrado en un informe de Cuestión de Fondo (Canal 9 Litoral) puesto al aire el año pasado.
Una característica particular del barrio Amarras: cuenta con un helipuerto. Según el empresario propietario e inversor, el mismo es de uso "público" y los gobiernos tienen a disposición para su utilización.
Puerto Urquiza, la cementera pasó a ser un valcón al río
En la zona de Bajada Grande, la vieja fábrica de portland se convirtió en el proyecto inmobiliario más ambicioso de Paraná. El proyecto cuenta con más de cienl loteos con costos que van desde los 35 a los 100 mil dólares cada uno, según ubicación y tamaño. El proyecto es de Jorge Anadón, empresario conocido por replicar autos en la provincia.
En el masterplan se incluyó la transformación del viejo edificio de la fábrica en el espacio central del barrio y modificar el muelle con el que contaba la cementera para poder hacer un puerto privado para los vecinos que vivan en el barrio residencial, ubicado frente a los boliches que hay en Bajada Grande. En estos momentos, hay alrededor de 15 viviendas construidas.
Las Colinas, una cancha de golf con vista al río
El Club de Campo Las Colinas pasa casi desapercibido. Es más conocido como la cancha de golf de nueve hoyos que hay al sur de la ciudad. Ubicado atrás del cementerio Solar del Río, Don Uva y cerca del camping de AGMER, es el emprendimiento privado al cual es más dificil acceder por el estado de las calles. Desde el pico más alto se puede observar el río en la costa oeste de la ciudad y esto revaloriza las propiedades. Además, el proyecto tiene un espacio compartido de 52 hectáreas, la cancha de golf, piletas y una plaza de juegos.
En estos momentos hay alrededor de 20 propiedades, pero no todas se pueden observar desde el perímetro porque es inaccesible a todo el alrededor del barrio. El valor del metro cuadrado en este barrio es de 35 dólares y por terreno, el valor promedio, es de dos millones de pesos según la cotización actual.
A modo de ejemplo, el alquiler de una casa con tres habitaciones y vista al río es de 30 mil pesos mensuales.