Central Entrerriano cosechó una buena victoria en su casa. En la noche de este domingo el elenco del sur entrerriano venció por 78 a 74 a Villa Mitre de Bahía Blanca en un partido que se enmarcó en una nueva jornada de la Conferencia Sur de la Liga Argentina de Básquet. El juego tuvo un arranque frenético, Central Entrerriano atacó  hundiendo la bola para Bernasconi y Córdoba, mientras que Villa Mitre respondió con un gran comienzo de partido del capitán Gutiérrez y Pennachiotti ganando el duelo interno.

Los primeros tres minutos fueron de goleo alto y con poca defensa de ambos lados, pero bastó con que Villa Mitre se vaya afianzando en el juego, para que los de De Tommasi pasen a controlar las acciones. En defensa complicando al local, negándole pase interior y cortando línea de pases, mientras que en ataque, de la mano de un inspirado José Gutiérrez y con Pennachiotti sumando en la pintura junto a Heinrich, los bahienses se fueron despegando, aprovechando un pasaje sumamente desconcertado de Central.

En los últimos cinco minutos del cuarto inicial el Rojinegro apenas anotó tres puntos y defensivamente pagó carísimos todos los errores. Villa mitre lo castigó desde todos lados, con Harina y Gutiérrez clavando dos bombazos y con la potencia de Pennachiotti en el juego interior, llegando al cierre del cuarto inicial con Villa Mitre al frente 31-16.

Central Entrerriano mejoró mucho su defensa, de hecho permitió solamente cuatro puntos de su rival en los primeros tres minutos del segundo cuarto. El problema fue la ofensiva del Rojinegro, que no pudo contra una defensa zonal 2-3 que planteó el visitante que le dio muy buen resultado. Central pasó casi cuatro minutos sin convertir, pero desde la enjundia de Gastón Córdoba, que metió cinco puntos seguidos y fue encendiendo al resto del equipo, el local fue hilvanando una levantada.

Apareció Capponi con dos triples, Córdoba siguió siendo el motor de la recuperación y Bernasconi volvió al juego con un par de buenas acciones ofensivas, para que el dueño de casa clave un gran parcial y se coloque en partido, aprovechando el único momento del primer tiempo en que Villa Mitre perdió claridad. El Rojinegro se pudo poner a tiro, aunque los bahienses recuperaron claridad en ofensiva con Amigo y Pennachiotti para cerrar al frente 44-37 al cabo de un intenso primer tiempo.

El complemento

Cuando todos imaginaban que la remontada de Central Entrerriano se consolide en el segundo tiempo, fue Villa Mitre el que arrancó fino, clavó 12 puntos en los tres primeros minutos y volvió a despegarse en el tablero. Central quiso dar pelea pero chocó contra sus propias imprecisiones, que le impidieron tener claridad al momento de atacar. De nuevo la defensa devolvió al partido al Rojinegro, que fue cerrando los caminos de su rival, que pese a tener a Pennachiotti cargado con cuatro faltas, mantuvo en cancha al muy buen pivote, que tuvo un duelo aparte con Bernasconi, quien también sumó cuatro personales.

El equipo del sur entrerriano se la jugó con un buen pasaje en el juego de Mateo Díaz y un buen aporte defensivo, que cerró los caminos de Villa Mitre y volvió a bajarle el goleo. En ofensiva, con Córdoba y Mateo Díaz como figuras, el anfitrión  tomó impulso y volvió al partido, peleó cada pelota como si fuera la última y llegó al cierre del tercer parcial abajo por cuatro unidades (57-61).

El cuarto final fue de hacha y tiza. Los dos se equivocaron y bajaron notablemente su intensidad, dentro de ese panorama Central Entrerriano se acomodó mejor, con la defensa como gran baluarte para tener mayor cantidad de posesiones. En ataque, un triplazo de Mateo Díaz y un par de buenas apariciones del capitán Forastieri, le permitieron a Central pasar al frente por primera vez en el juego (69-68), aunque un nuevo triple de Gutiérrez devolvió enseguida a los bahienses al frente.

De ahí en más el partido fue palo y palo, los dos cambiaron ataque por ataque, las defensas también jugaron su partido, hasta que cuando quedaban 14 segundos, Córdoba encontró a Bernasconi solo bajo el aro para poner arriba de nuevo al Rojinegro.

Villa Mitre jugó la última y apareció una sensacional defensa de Central, que nunca cambió las marcas y le negó el pase interior para Pennachiotti. Forastieri con dos libres se encargó de cerrar el juego y el Bértora celebró el triunfo como una final, por lo complicado, porque fue ante un rival de enorme jerarquía y porque le permite a Central Entrerriano seguir firme en su cancha y creciendo en las posiciones.