El concejal de Paraná David Cáceres (Frente de Todos) analizó los pormenores del trabajo que se efectúa en el órgano legislativo local a casi un año del recambio de autoridades y en el contexto de la pandemia.  

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Cáceres refirió a la protesta que realizarán los trabajadores municipales este viernes y sostuvo que “los empleados vienen haciendo un reclamo genuino, entendible, con el cual no se puede no estar de acuerdo, pero hay que contextualizar esta situación en la situación económica y financiera del municipio”.

“Hay que entender que se recibió un municipio con una deuda de más de 1.500 millones de pesos y de hecho en diciembre no se pudo pagar los haberes y hubo que pagarlos en enero donde hubo que sancionar una ordenanza, producto de la profunda crisis en la cual se recibió el municipio en el marco de una emergencia sanitaria que el municipio no podía garantizar la prestación de servicios básicos, y así infinidad de situaciones que nos condicionaban enormemente. Hoy no tenemos esos problemas, se prestan y garantizan los servicios, se está reacomodando la situación financiera para no tener estas complicaciones pero no se pueden comprometer situaciones que no se puedan garantizar”, analizó.

En ese sentido, destacó que “el intendente semanas atrás dio un adelanto de una suma fija esperando poder en noviembre o diciembre empezar a tener charlas con los empelados tenido una proyección más certera de los ingresos del municipio, que han mermado muchísimo por la crisis que provocó la pandemia”.

No obstante, mencionó que “hay en marcha obras importantes con financiamiento nacional que son producto de mucha gestión fundamentalmente en la persona del intendente quien ha viajado reiteradas veces a Buenos Aires para reunirse con funcionarios nacionales; el Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento (Enohsa) ha sido un buen aliado en esto porque se reactivaron obras como el colector cloacal sur que se había iniciado en el periodo anterior, una obra que estaba abandonada y que casi la perdemos por falta de entrega de los certificados correspondientes”.

Resaltó que todo esto “es inversión que genera empleo y que va generando un movimiento en la ciudad que es importante verlo pero que es con mucho trabajo y mucho sacrificio, y la mayoría de los fondos son producto de la gestión y no genuinos del municipio”.

La relación con la oposición

En otro orden de temas, se refirió a los vínculos con la oposición en la nueva composición del Concejo Deliberante y afirmó que “hoy se vive otro clima, hemos recuperado la institucionalidad no solo en el Concejo Deliberante sino en el municipio en su conjunto”.

“Hoy se trabaja de otra manera y lo destaqué en la última sesión, porque no era normal que los concejales nos pusiéramos de acuerdo. En el período anterior resaltábamos la falta de presencia del Estado en algunos barrios y exigíamos el compromiso del diálogo, ni siquiera había respuestas concretas a los vecinos y las sesiones en periodos anteriores dejaban mucho que desear. Se llegó al punto de que se violentara a concejales, hubo denuncias de por medio, tuvimos que pasar a declarar, era algo anormal. Hoy ya no se vive eso y los proyectos que se presentan hoy no son para resaltar la ausencia del Estado municipal sino para despejar dudas de los vecinos producto de la acción del Estado generando obras y llevando adelante actividades en los barrios, o planificando más allá del día a día al que lleva la rutina”, comparó.

Como ejemplo, comentó que “se están tratando proyectos que tienen que ver con la mitigación del cambio climático, el intendente está gestionando recursos para tener una planta de tratamiento de residuos cloacales porque debemos ser la única capital de provincia que arroja sus desechos al río de forma cruda”. Ante ello, planteó que “no era normal trabajar en un Estado colaborativo, donde se pueda debatir y que esas distintas visiones se puedan conjugar en ordenanzas importantes para la gestión”.

Específicamente sobre la relación con los actuales concejales del radicalismo que fueron funcionarios importantes en la gestión de Sergio Varisco, Cáceres aclaró: “Tener una relación buena no quiere decir que seamos amigos. Les he remarcado a quien fue secretario de Legal y Técnica (Walter Rolandelli)  y a quien fue fiscal de Estado (Sergio Avero) sobre cuestiones que sucedían en la gestión anterior y que hoy ya no suceden. Hoy no tenemos problemáticas que pueda marcar la oposición de la índole que nosotros planteábamos”.

No obstante, señaló que “indefectiblemente un órgano como el Concejo Deliberante necesita generar consensos y tener la mayoría necesaria para sacar las normativas” y como ejemplo mencionó “para el endeudamiento para poder hacerse de bienes de capital para el municipio, se necesitaban mayorías especiales y en eso hay que dialogar y generar los consensos para lograrla, pero en esto no hay una connivencia ni amistad personal sino que trabaja de una forma en la que se debería haber trabajado siempre y que en la gestión anterior no era normal”.

Problemas del transporte

Consultado por la situación conflictiva del transporte urbano de pasajeros, Cáceres explicitó: “Dividiría el conflicto del transporte en dos periodos: lo que fue desde la concesión nueva hasta el inicio de la pandemia, y desde la pandemia hasta aquí donde no se puede hacer un análisis objetivo de nada porque en la parte más dura de la cuarentena hubo pasaje cero y hoy se cortan 16.000 boletos que no llega ni a un tercio de lo que era un día normal, es decir que hoy sí es déficit tener una empresa de colectivos en Paraná”.

“Por eso hace un tiempo presentamos un proyecto para auditar a las empresas pero no en este contexto sino en todo el proceso de adjudicación de la concesión para saber cuánto dinero ganaban cuando comenzó la nueva licitación, cuando comenzaron a perderlo, cuál es la variación, y hoy es una situación compleja porque vamos a vivir una nueva normalidad que nos llevará a que post pandemia no sea el mismo servicio, las personas dejarán de optar por este servicio, ya lo han hecho, y habrá que rediscutir todo el sistema de movilidad urbana en Paraná”, analizó.

En este sentido, sostuvo que “en el marco del SITU que se volvió a retomar, cuando la situación sanitaria lo permitió comenzamos a reunirnos con las empresas para discutir la prestación del servicio y sobre todo las obligaciones que tienen las empresas de implementar tecnología de GPS”.

Respecto de la cuestión de los subsidios, dijo que “se venía discutiendo y tratando de ajustar antes de la pandemia, porque la nueva gestión había hecho fuerte hincapié en intimar a las empresas por falta de cumplimiento de los pliegos, lo cual no se había hecho nunca, pero luego de la pandemia no solo vamos a tener que discutir estas cosas sino también todo lo que es la movilidad urbana en la ciudad de Paraná”.