Un hombre murió luego de caer con su auto en una alcantarilla

Una persona falleció después que el automóvil en el que se desplazaba por la ruta 18, cayó por una alcantarilla, quedando semisumergido en posición invertida, en las aguas que corren por debajo. El hombre fue identificado como Ramón Benítez, de 42 años, un faenador del frigorífico Los Blanquitos, oriundo de Colonia Avellaneda. El accidente ocurrió entre la noche del viernes y la madrugada del sábado, pero recién fue advertido por los vecinos en horas de la mañana. Las causas del siniestro están siendo investigadas por la jueza de Instrucción Susana Medina de Rizzo.

Benítez era faenador de un frigorífico paranaense, y se supone que en momentos en que regresaba a su domicilio en Colonia Avellaneda por la altura del kilómetro 12,5 de la ruta 18 se precipitó al vacío con su automóvil, un Ford Taunus celeste. El rodado impactó frontalmente sobre la base de cemento de la obra y quedó semisumergido en el agua en posición invertida. Las estimaciones realizadas por los peritos de la Policía indican que la muerte sobrevino por el impacto o por ahogamiento.

Inmediatamente que advirtieron el accidente, los vecinos llamaron al Comando Radioeléctrico y de inmediato llegaron al lugar móviles de esa división, de la Comisaría de Colonia Avellaneda y de San Benito, junto a personal de la Sección Rescate de los Bomberos Zapadores, del Gabinete de Accidentología Vial de Criminalística; y más tarde lo haría también la jueza de Instrucción Susana Medina de Rizzo.

El cuerpo de Benítez recién pudo ser rescatado varias horas después, una vez que pudieron poner el auto en posición normal, ya que había quedado atrapado debajo del techo. El cuerpo presentaba graves heridas en el rostro producidas al impactar el descontrolado rodado sobre la base de cemento de la alcantarilla donde corría bastante agua. El cuerpo fue trasladado hasta la morgue de Oro Verde para realizarle la autopsia.

Si bien las causas del accidente no habían sido determinadas aún, los peritos estimaron que Benítez conducía el rodado saliendo de Paraná cuando, por causas que no han podido establecerse, el auto invadió el carril contrario y se precipitó al vacío desde una altura no menor a los cuatro metros, impactando fuertemente con una base de cemento, por lo que el vehículo rebotó y cayó en posición invertida en la corriente de agua.

Fuente: El Diario.

Edición Impresa