Después de muchos idas y vueltas, incertidumbre y negociaciones truncas, Boca oficializó en la mañana de este lunes que tiene nuevo entrenador: el elegido por Juan Román Riquelme es Jorge Almirón. Después de seis meses sin ejercer tras sus salida de Elche, DT se hizo cargo del plantel azul y oro para afrontar, probablemente, el mayor desafío de su carrera.

Y tamaño desafío, lógicamente, implica un grupo de trabajo capacitado para acompañarlo, ayudarlo, complementarlo y brindarle las herramientas necesarias para que todo funcione como se desea. En otras palabras, un cuerpo técnico.

Almirón será la cabeza, pero a su lado ya es un hecho que aparecerán como ayudantes de campo dos hombres que vienen trabajando con él y, por ende, conoce a la perfección: el entrerriano Maximiliano Velázquez y Pablo Manusovich.

En el caso del primero, a muchos les resultara conocido por su pasado reciente como futbolista en clubes como Ferro, Independiente y fundamentalmente Lanús, donde dejó su huella con cinco títulos y además se convirtió en el jugador que más veces vistió esa camiseta.

¿De dónde nace su vínculo con Almirón? justamente del Granate, club en el que lo dirigió en los años 2016/17 en lo que fue una campaña histórica, con fútbol de alto vuelo y consagraciones en el Torneo de Primera División y la Supercopa Argentina 2016, además de haber llegando a la final de la Copa Libertadores. La incorporación de Velázquez al cuerpo técnico es reciente, ya que se sumó en el último paso por Lanús y también en Elche.

Por su parte, la ligazón con Manusovich data de hace varios años atrás, siendo así su hombre de confianza en el corralito en varios de los equipos que comandó.