En una entrevista con “Cuestión de Fondo”, el periodista Juan González anticipa los ejes de su nuevo libro sobre Javier Milei y revela cómo el componente místico y religioso atraviesa decisiones clave del gobierno.
De ANÁLISIS
Este viernes se presentarán los periodistas Juan González (Revista Noticias) y Victoria De Masi (ElDiario.Ar), en el Ciclo de Charlas de ANÁLISIS; en un encuentro titulado “Milei, poder y elecciones”, y que está programado para las 20 en el octavo piso del hotel Howard Johnson Mayorazgo en Paraná. El panel será presentado y moderado por la periodista Evangelina Ramallo, de Canal 9 Litoral.
González es autor de los libros “El Loco” (2023), biografía de Javier Milei, y ahora viene a presentar “Las fuerzas del cielo” (2025), secretos, confesiones y peligros de la primera presidencia mesiánica. Mientras que De Masi publicó el libro “Karina: la hermana, El Jefe, La Soberana”.
González fue entrevistado anoche en el programa “Cuestión de Fondo” (Canal 9, Litoral), donde explica por qué en “Las fuerzas del cielo”, vuelve sobre la figura de Javier Milei con un enfoque tan inquietante como necesario: el vínculo entre poder, religión y pensamiento mágico en el corazón mismo del gobierno. “Milei toma decisiones en base a lo místico”, advierte. Además, relata cómo esa dimensión esotérica —desde la influencia de Karina Milei hasta los sueños con el Rey David y el rol clarividente de sus perros clonados— no sólo estructura la intimidad presidencial, sino también la arquitectura del Estado. “Para estar cerca de él, hay que creer que tiene un poder sobrenatural”, resalta. Y señala que la teología política no es un resabio medieval, sino la narrativa central de un régimen que construye sentido desde ese esoterismo.
- ¿Por qué siguió en esa línea de trabajar temas de Milei y su entorno?
-Las fuerzas del cielo no me dejaron opciones. Porque cuando empecé a seguir a (Javier) Milei, en esa primera marcha de La Libertad Avanza en el ´21 en la Ciudad de Buenos Aires, me interesaba el fenómeno. Pero, ni imaginaba que estaba siguiendo o contando la crónica de un ascenso al poder, al gobierno. Y, desde entonces, muchas de las cosas que vi, que fui investigando y enterándome del gobierno, del capítulo místico, y el capítulo esotérico, el libro de “Las fuerzas del cielo” está todo dedicado a esta faceta… me atraparon, no me dejaron mucha más opción. Siento que es un tema que no se le da la atención que lo merece; que no se logra calibrar en la real medida que el presidente Milei está… tan influenciado por lo místico, donde toma decisiones en base a lo místico, donde condiciona el armado del gobierno nacional. Viene de dar un discurso Milei en Israel que es impresionante. Por eso un discurso donde hubo un rey de hace 500 años y, bueno, uno lo va naturalizando. Pero, bueno, un montón de hechos que me siguieron enganchando con el personaje. Y más allá de esta faceta de investigar a Milei, a la nueva derecha, soy un periodista que hace política y creo que es un aporte para terminar de atender a Milei.
-O sea, sigue en este libro en la misma línea. Pero, contando más historias a partir de su asunción presidencial o los últimos tiempos de campaña. Por ahí va la línea. Es decir, no hacés un análisis político, sino que contás historias de Milei y su grupo. ¿Es así?
-Bueno, es un poco de ambas, ¿no? O sea, es un libro exclusivamente dedicado al misticismo, a lo religioso, a lo esotérico de Milei y del gobierno nacional. Está exclusivamente basado en eso. Desde el Milei joven de los 11 años, la primera vez que le aparece una “fuerza de cielo” -literal-. O sea, la primera vez que tiene una experiencia sobrenatural, que es cuando el padre lo está golpeando en esa vida tan compleja, tan dura que tuvo Milei, y la hermana en ese momento 9 años, lo sale a defender y cómo se pelea con el padre. Aparece literalmente “una fuerza del cielo”, o sea, aspectos de la vida previa y privada de Milei, condicionada por el misticismo hasta esa faceta que como explica hoy y como explica hoy al gobierno nacional. O sea, cómo influye en la toma de decisiones los personajes y la gente de gobierno que fueron subiendo peldaños jugando a la carta del misticismo; y por último hay análisis político más teórico, de entender por qué está este pensamiento mágico que el gobierno tiene tan a flor de piel; de la lucha del bien contra el mal, que es el principal sostén narrativo del gobierno, también conecta y penetra mucho con el mundo de hoy. O sea, la idea de que el pensamiento mágico está mucho más presente de lo que nos podemos ocurrir, o sea, no solo el misticismo, la religión más formal, sino incluso en cómo la tecnología nos ha cambiado la cabeza y hay mucho que juega y que impacta en esa línea. Entonces también se tendrá el discurso del gobierno en ese sentido. Es un discurso -lo naturalizamos-, pero Milei presenta abiertamente a su gobierno como una lucha del bien contra el mal, así también va profundizada la construcción de relatos del gobierno.
-Esa cuestión mística que hacés referencia, ¿tiene que ver solamente con Milei y su hermana Karina o hay algunos personajes más que se incorporan a ese tema?
-Creo que para estar cerca de Milei de manera directa tenés que subirte al misticismo. O sea, creer efectivamente que él tiene algún poder sobrenatural o que está gobernando a la Argentina por una especie de signo divino. Ahí lo tenés a Luis Caputo, a Santiago Caputo, a muchos de la banda de Santiago Caputo, a mucha gente que rodea a Karina Milei. Y después tenés a muchos otros que “son vivos” y están subiendo peldaños. Pero que de manera indirecta terminan colaborando con el monstruo del misticismo, porque esta idea de que Milei es un líder clarividente que nunca se equivoca, que tiene la respuesta ante todo y ante quien no se le puede discutir ni siquiera una coma, que está presente en todos los funcionarios del gobierno nacional, no es literalmente una muestra de mesianismo, pero en la práctica se parece. O sea, de ahí le tienen pánico en el gobierno nacional. Los ministros tienen pánico, los secretarios le tienen pánico, nadie se anima a tener una idea propia distinta del gobierno. Entonces termina construyendo este escenario. Pero, después hay pisos, digamos, de misticismo directo, o sea, una manera clara y fácil de subir peldaños en el gobierno, que también significa subir peldaños en la carga política, en las condiciones materiales de vida y en otros tipos de negocios, está “cortado” por lo esotérico.
-Uno siguiendo los movimientos de Milei en este período de gobierno, nota que no hay dirigentes de la oposición que le remarquen o que le cuestionen mucho ese aspecto que mencionás. En esta suerte de alianzas que él va haciendo en el exterior, algún gobernante de países importantes ¿le han planteado o le han preguntado en algún momento esta cuestión del tema místico?
-Hasta donde sé, no. Y esto pasa mucho acá, que muchos piensan que Milei es metafórico cuando habla de las fuerzas del cielo. Traigo un ejemplo muy cercano: Milei va a Israel y confirma la mudanza de la Embajada Argentina, desde Tel Aviv a Jerusalén. Y le preguntan los periodistas de Israel, y él dice – textual- el uno en las sagradas escrituras lo estableció así, cuando rompió las tablas Moisés, la primera palabra que él dijo fue Jerusalén, y así se lo ordenó también al rey David. Entonces, hay que llevar ahí a la embajada. Y lo tomaron como si fuera una metáfora o una cosa. Y Milei lo está diciendo literalmente, toma una decisión central para la geopolítica internacional, central para el reclamo argentino en Malvinas, algo que incluso es ilegal en cuanto a las resoluciones de la ONU en varios sentidos, en base a un texto místico. Y Milei en privado es mucho más crudos con este tema y dice que le aparece el Rey David en un sueño y se lo pide. Entonces, por un lado, mucha gente no lo conoce a fondo, lo toman como algo metafórico, y por el otro, creo que está empezando a cambiar. De hecho, para él fue una gran sorpresa cuando la primera entrevista que dio Cristina en estos últimos tiempos con “El Gato” (por Gustavo Silvestre) en C5N, lo primero que dijo y lo remarcó unas cuantas veces a lo largo de la nota fue, “esta es una derecha esotérica”. Que la primera vez que escucho a una dirigente de ese calibre, poniendo el esoterismo en el primer plano de este gobierno. A Elisa Cardio la he escuchado varias veces en esa línea.
-Elisa Carrió es, de alguna manera, una dirigente cercana a algunas cuestiones místicas.
-Total. Me acuerdo una vez que decía que hablaba con Dios o con la Virgen a través de una lombriz. El pensamiento mágico habita en muchos de nosotros, mucho más de lo que creemos. De hecho, el gobierno esto lo sabe y lo aprovecha. La idea también de construir una narrativa del gobierno con algo sacrificial, que es una idea bastante bíblica-religiosa, está construida desde el gobierno y no es para nada casual.
- ¿Cuál fue la anécdota que más lo sorprendió y le puso más énfasis para contarla en el libro?
-Varias cosas muy impactantes. Esa primera vez que le aparece a Milei lo místico cuando lo estaba golpeando su padre, es muy impresionante, porque también habla de lo que fue la vida de Milei, que fue realmente muy difícil. Y uno lo naturaliza para analizarlo, pero es el presidente y gobierna Argentina. Pero, es realmente un nivel de horror que sufrió Milei, muy impresionante. El libro tiene las primeras dos entrevistas al brujo, al hechicero de Milei -se llama Gustavo-, que son muy impactantes las notas. A mí me impacta mucho. La primera nota con él, me ofrece hablar con mi abuelo. Me dice que no vine solo, que está mi abuelo con conmigo, y me dice si quiero hablar con él, con la particularidad de que mi abuelo está muerto hace 20 años. Y, bueno… entonces… lógicamente no hablo con él. Y eso también fue un momento bastante impactante. Bueno, está el asunto “perruno” de Milei. En el libro se prueban los documentos, que son charlas de Milei privadas, donde él cuenta cada uno del rol que él cree que tienen sus perros; los perros clonados de Conan, que es muy impactante, pues de hecho dice ahí que ellos que ven el futuro. O sea, es un rol de clarividencia en la política muy impresionante, hay mucho, sobre todo, esta idea de la religión y la politización. Religión y política, nosotros pensamos o muchos pensamos como caminos que se han dado separado, se cruzan; que Milei es un régimen que utiliza la religión para construir política, que es lo que se llama teología-política lo que hacen, y no deja ser impactante, algo que uno podía pensar que en el 2025 ya no iba a existir más.
Programa “Cuestión de Fondo” (Canal 9, Litoral)