La jefa de Infectología del Hospital San Martín de Paraná y ex secretaria de Salud de la provincia, Adriana Bevacqua, se refirió a la actual situación respecto de la pandemia y opinó sobre el escándalo de la vacunación VIP.
En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Bevacqua dijo que el escándalo del vacunatorio VIP le cayó “pesimamente mal” tanto lo ocurrido en la Nación como en la provincia y opinó que “hay una situación muy grave en Capital Federal porque más allá de la falta total de solidaridad y ética de aquellos que ofrecieron vacunas y de quienes accedieron vacunarse, la entrega de vacunas a las prepagas hace mucho ruido”.
“Es una vergüenza que costó la cabeza de un ministro; lamento que Ginés se haya tenido que ir de esa manera, porque si bien estuvo muy mal lo que hizo y no lo justifico, es un hombre que demostró ser capaz, porque cuando asumió el Ministerio de Salud no existía y el sistema podía colapsar y todo lo que se hizo es mérito de Ginés. Se debería haber ido por la puerta grande y fue una idiotez lo que se hizo. Estuvo mal”, reflexionó.
En tanto, cuestionó la insistencia de algunos medios de comunicación en las críticas: “Si bien está muy mal lo que pasó, también se inventan muchas cosas. El presidente actuó muy rápidamente, lo hecho costó la cabeza de un ministro que es un hombre de mucha categoría. Esto afectó, tocó fibras íntimas y va a seguir haciéndolo porque es algo que está pasando en todos lados”.
“Todo esto es horrible, y ante aquellos que exigen que se les entregue la vacuna no deben renunciar los que se sienten presionados sino que tienen que denunciar a los que están presionando. Y dar nombre y apellido, para sincerar las cosas. Los que se tienen que ir son los que no tienen la ética suficiente para decir basta”, reflexionó.
Agregó que "esto está pasando en todo el mundo, pero no debería pasar. Lo que está motrando esta pandemia son todas las injusticias y las diferencias sociales".
Por otra parte, la profesional lamentó “el relajamiento y la irresponsabilidad de la sociedad que no usa barbijo pero después reclama que haya más apertura” y advirtió que “se está esperando una segunda ola, porque el aumento de casos que hubo en diciembre solo fue un rebrote debido a las aglomeraciones del velatorio de Maradona, la ley de aborto, las fiestas”.
“Lo que hay que tratar de hacer es prevenir; que la segunda ola se aleje lo más posible y tener la mayor cantidad de gente posible vacunada para afrontarla. Por otro lado, hay que tener en cuenta que cuanto más gente se contagie, más posibilidad hay de que las cepas muten, y por eso hay que ser responsable con estas cuestiones”, alertó.
Remarcó asimismo que “hay que seguir cuidándose igual que antes, pero hay un relajamiento importante y eso es una irresponsabilidad y falta de solidaridad de mucha gente. Hay que seguir firmes con la distancia, el uso del barbijo y el lavado de manos, más allá de las vacunas”.
En tal sentido, planteó que “habría que ver qué otras medidas punitivas se pueden tomar con aquellos que son irresponsables”.
En cuanto a la realidad de los trabajadores de salud, Bevacqua sostuvo que “hay cansancio y agotamiento, y hay también enojo por los vacunados VIP; hay mucho trabajo que no afloja, en los últimos dos meses creció el trabajo de manera impresionante y la gente está muy cansada”.