El presidente de la Empresa Energía de Entre Ríos S.A. (Enersa), Jorge González, brindó un panorama del trabajo que se realiza en este tiempo de pandemia y marcó que si bien hay “una morosidad creciente y elevada” no se realizan cortes ni suspensiones por falta de pago.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), González destacó que “desde el 16 de marzo de 2020 se decidió no suspender ni cortar ningún servicio, y luego salió el DNU nacional donde se fijaban los alcances de esta medida pero en Entre Ríos se decidió aplicar la misma política para todos porque es muy crítico y muy sensible delimitar”.

“Hace más de 15 meses que estamos en la misma situación sin cortes ni suspensiones del servicio para nadie. Y además se ha trabajado con los distintos sectores, como el caso de la Unión Industrial que pidió reducir la contratación de potencia cuando fue la cuarentena estricta y muchas empresas tuvieron que cerrar, y hoy se están dando situaciones similares”, explicitó.

En ese marco, reconoció que “hay una morosidad importante y en crecimiento, pero en tanto y en cuanto no se acuerde con la Nación la metodología de pago, la cantidad de años y la tasa subsidiada que se va a acordar, las cosas seguirán igual”.

Sobre ese nivel de morosidad, apuntó que “el sector turístico y de servicios es el más fuerte donde se ha sentido notablemente la falta de pago y también hay un importante sector residencial que no está abonando la factura. El mayor porcentaje de morosos se concentra en esos dos sectores: la industria tiene altibajos porque algunas están trabajando bien y hasta crecieron en su producción, pero hay otras que han tenido altibajos, que cerraron y luego se repusieron medianamente. El sector industrial tiene altibajos y el sector residencial es la mayor cantidad con el sector de servicios”.

Reiteró que “no se están efectuando cortes por falta de pago porque se está trabajando con la Nación, y una vez que se acuerde esa situación se trasladará al usuario. Habrá un sistema igual que ahora, el usuario que pueda ir pagando la factura corriente se abona y la deuda que tengan en pandemia seguramente habrá un plan de pago a muy largo plazo y con una tasa subsidiada que es lo que estamos esperando acordar con Nación”.

En cuanto a las quejas de los usuarios por los altos intereses que se están aplicando para las facturas adeudadas, el funcionario explicó que “hay un régimen de contrato de concesión y reglamento de suministro donde por ley provincial tenemos que aplicar la tasa activa del Banco Nación en un plan normal hay, por eso se busca acordar con la Nación donde seguramente habrá una tasa subsidiada que estará al 50% o un porcentaje similar de reducción, y ese acuerdo se trasladara al usuario en esas condiciones: un plazo extenso de pago y una tasa muy inferior a la actual”.

En este contexto, comentó que “se retrasaron algunas inversiones que si bien estaban planificadas a efectos de la calidad del servicio no eran prioritarias, se fueron regulando pero no obstante hoy hay muchas obras en la calle”. En ese sentido, marcó que “hay un indicador que demuestra la calidad del servicio y es la cantidad de horas de corte por año por usuario. Desde 2017 que empezó en la provincia el plan estratégico a 10 años se redujo esa cantidad de horas de corte anual a la mitad: teníamos 7 horas con 40 por usuario por año y hoy tenemos 3 horas con 70. Es decir que pese a la pandemia hemos seguidos avanzando en mejorar la calidad del servicio”.

Al respecto, apuntó que “son elementos que reflejan que al ser un servicio esencial no se puede reducir ningún tipo de inversión que tenga que ver con la calidad, y allí ponemos todos los cañones en primer lugar cuidando a los trabajadores”. En tal sentido, puntualizó que “en este tiempo de pandemia solamente se contagió el 7,5% de los trabajadores de Enersa, menos de 83 personas, y más del 90% se contagió fuera de la empresa porque desde el inicio de la pandemia se han aplicado turnos rotativos, teletrabajo –con 220 puestos de trabajo remoto- y la empresa funciona correctamente con ese sistema”.

“Esto ha permitido que no haya contagios masivos y que no se tengan inconvenientes a la hora de brindar el servicio y de sostener la calidad, que es lo primordial que se ha fijado como política energética en el plan estratégico a 10 años”, resumió.

Consultado por la situación del sector productivo sostuvo que “hubo muchas consultas porque muchas empresas en su momento cerraron, y por ello se redujo la contratación de potencia a la mínima expresión lo que les produjo un menor costo en su situación crítica, y cada caso en particular se analiza y se resuelve individualmente. No se hacen planes de pago masivo porque hay que analizar cada situación particular”.