El abogado, ex legislador nacional y provincial, y ex convencional constituyente, Rodolfo Parente, analizó la realidad política argentina de las últimas semanas con los cambios en el Gabinete tras el resultado desfavorable al gobierno en las PASO, la influencia en la Justicia y los anuncios en relación a la pandemia.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Parente afirmó que “el nuevo Gabinete nacional es más de lo mismo” y definió que “la remoción del canciller Felipe Solá fue un papelón”. “Creo que en la historia argentina no ha habido un papelón de tan alto nivel de esas características, así que en este aspecto no veo mayores avances”, señaló.

Basado en su conocimiento de las relaciones exteriores teniendo en cuenta que su padre fue embajador en Portugal, explicitó que “el servicio exterior argentino debe ser uno de los que dentro de todo funciona bastante bien, gracias a la creación de la Escuela de servicio exterior de la Nación donde se estudia y se gradúan quienes acceden a los cargos diplomáticos que no están reservados al poder político. De esta forma es un estamento de gente dedicada, con códigos bastante estrictos en cuanto a protocolo y demás, y son personas bastante atentas a lo que sucede en el país para poder trasladarla de modo razonable al exterior”. 

“No opino sobre los embajadores políticos que es un resorte del Poder Ejecutivo, a mi juicio excesivo y con demasiadas atribuciones y generalmente los países importantes se envían embajadores políticos”, aclaró.

“Lo sucedido es un papelón más de los que nos tiene acostumbrados esta gestión, en el ambiente debe haber caído pésimo, y con el agravante de que se nombró al frente de la Cancillería a Santiago Cafiero que –según diría Borenstein- fuera de alquilar un departamento para seis en Florianópolis no se le conoce otra condición”.

Por otra parte, consideró como “una irresponsabilidad total” los cambios anunciados en relación a la flexibilización de los cuidados por la pandemia. “Hemos pasado del encierro al libertinaje sin solución de continuidad. Nos estamos arriesgando claramente a que pueda haber un rebrote, más con la llegada del calor que está próxima”, advirtió.

Asimismo, cuestionó que en el marco de las elecciones de noviembre, y tras el resultado adverso para el gobierno en las PASO, “se va a largar una serie de regalos y beneficios que apuntan en todas direcciones, de manera casi esquizofrénica” y como ejemplo mencionó que “se subió el piso de Ganancias para quienes ganan sueldos de 175.000 pesos lo que apunta a la clase media alta con pretensión de que pueda cambiar el voto –cosa bastante poco creíble- y para abajo regalan heladeras y lavarropas”.

“En la provincia de Buenos Aires puede pasar cualquier cosa, pero no sé si esto tendrá efectos en el resultado electoral, creo o espero que no”, resumió.

Consultado por la influencia del resultado de las PASO en el accionar judicial, teniendo en cuenta el avance de las causas de corrupción que se siguen contra el ex gobernador Sergio Urribarri, refirió que “se aceleran indebidamente algunas causas que ya deberían tener una conclusión desde hace bastante tiempo”. “En este tipo de casos que son una vergüenza, me parece que tienen resultados electorales porque la gente ve con desagrado que hay diferencias, que hay algunos que son más iguales que otros. Estas cosas tienen que ver, lo asocio claramente”, reflexionó.

Del mismo modo, sostuvo que “a nivel nacional es peor todavía porque se siente más el peso sobre Comodoro Py”. “Puede haber una agilización de ciertas causas, aunque no muy apresurada, y esto sería bueno para empezar a poner algunas cosas en su lugar porque de otro modo seguimos con la justicia para algunos y no para todos, y no debería ser así”, definió.

Afirmó que “las causas de corrupción son causas complejas, que requieren de peritajes muy delicados, incluso en algunas causas hubo dificultades para conseguir peritos y demás, pero dentro de todo la Justicia de Entre Ríos ha tenido una actuación digna. Aunque a mi juicio debería ser un poco más rápida, pero ha sido digna”.

Respecto de las causas contra Cristina Fernández de Kirchner, señaló que “hay dos causas que son flacas: la del dólar futuro es una cuestión de especulación, de estrategia económica que no sé es materia judiciable; el tema de Irán tuvo consecuencias trágicas con lo de (el ex fiscal Alberto) Nisman pero tiene su debilidad en ciertos aspectos; no así las otras causas donde es más obvio que hay responsabilidades claras”.

“En todo esto ya deberían haberse tomado medidas judiciales apropiadas al caso, pero no se ha hecho y esto genera una desconfianza en la sociedad, lo que tiene sus resultados”, refirió.

Por último, opinó que “Casal está aferrado y la Procuración tiene una línea judicial hacia los fiscales, que tienen posibilidad de avanzar o no de acuerdo a la política criminal y judicial que se intenta impulsar. Lo ideal sería que haya un Procurador elegido por el Congreso pero no sé eso irá a suceder en los dos años que quedan. Soy bastante escéptico en ese sentido y tampoco (Daniel) Rafecas me merece demasiada confianza, en lo personal me parece que estuvo flojo en la causa de enriquecimiento ilícito de Cristina Kirchner”.  

“En el fondo no creo que esto pueda incidir en la política criminal, lo que si debemos decidir es qué política criminal queremos, especialmente en algunos aspectos sensibles como son los delitos más graves. Hay que ponerse de acuerdo entre las fuerzas políticas más importantes y decidir qué se quiere hacer en materia de seguridad”, concluyó.