
El cantante Elián Valenzuela, conocido como L-Gante, recibió una condena de tres años de prisión en suspenso por amenazas coactivas, tras un juicio en los Tribunales de Mercedes. Sin embargo, fue absuelto de la acusación de privación ilegítima de la libertad, que preveía una pena más severa.
El juez Ignacio Racca explicó que la decisión se basó en las pruebas presentadas durante el juicio y en la falta de antecedentes del cantante. A pesar de la condena, L-Gante se mantiene firme en su insistencia en su inocencia.
La condena se debe a una discusión con tres jóvenes tras un incidente vial en enero de 2022, donde el cantante admitió haber estado alterado y proferir insultos. El juez destacó que existieron daños a un vehículo, con rayones que indicaban una acción intencional.
El cantante se enfrentó a un juicio por amenazas agravadas, privación ilegítima de la libertad, tenencia de estupefacientes y encubrimiento calificado. La fiscalía pedía siete años de prisión por la acusación de privación ilegítima de la libertad.
La defensa del artista logró que se desestimara la acusación de privación ilegal de la libertad a su amigo Daniel Emanuel De Marco, y también fue absuelto por la tenencia de drogas ya que la cantidad no hacía presumir que no fuera para consumo personal.
La denuncia se inició por intermedio de unos vecinos de General Rodríguez, lo que provocó que Valenzuela estuviera casi 100 días detenido. La querella pedía ocho y tres años de prisión para el cantante.
Durante el juicio, L-Gante relató su versión de los hechos, explicando que el incidente comenzó cuando una mujer en una camioneta pasó por delante de él de manera alborotada. A pesar de intentar dialogar, el vidrio se cerró y no pudo hablar con ella.
El cantante declaró que sabía que estaba la peregrinación en la zona y que la mujer no iba a ir muy lejos. Cuando la alcanzó, ella frenó y él bajó del vehículo para hablarle, pero ella cerró el vidrio.
El fiscal Adrián Landini había pedido siete años de prisión para L-Gante por la acusación de privación ilegítima de la libertad. Sin embargo, el juez Racca consideró que no había suficientes pruebas para condenarlo por ese delito.
La absolución por la tenencia de drogas se debió a que la cantidad encontrada no indicaba un uso distinto al consumo personal.
El veredicto pone fin a un proceso judicial que ha generado gran interés en la opinión pública, dada la popularidad del cantante como referente de la cumbia 420.
L-Gante deberá cumplir reglas de conducta durante su prisión en suspenso, que incluyen no cometer nuevos delitos y mantener una buena conducta. La defensa considera que el veredicto es un logro, ya que se desestimaron las acusaciones más graves.