Patronato perdió en Isidro Casanova en una noche para el olvido

de ANALISIS DIGITAL

Los equipos recién se estaban acomodando cuando Maximiliano Stevenot, el árbitro del partido, pitó una infracción de Walter Andrade dentro del área. El Negro, tras un error defensivo, le cometió falta a Ricardo Chavarri. El juez cobró y Daniel Vega, con un remate que dejó sin chance a Sebastián Bértoli, se encargó de cambiar por gol. Con el tanto del Trapito no sólo se rompió el partido, sino que la Fragata cortó una racha de tres presentaciones sin gritar un gol.

En los minutos siguientes poco pasó cerca de las áreas. El trámite fue más luchado que jugado, aunque en ese contexto fue Patronato el que tuvo más contacto con el balón. Igualmente, el Santo no inquietó demasiado al local, a excepción de un tiro libre de Gabriel Bustos que pasó rozando el ángulo derecho.

Después, Walter Andrade ganó en el área contraria tras un centro frontal del Chaca pero su cabezazo se fue por encima del travesaño, aunque la jugada estaba invalidada por posición adelantada. Luego, Bustos, el más desequilibrante en el visitante, desbordó por izquierda aunque nadie pudo llegar a conectar su centro.

No sucedió mucho más que eso en la etapa inicial para el Rojinegro, que si no fuera por Sebastián Bértoli se hubiese ido al descanso dos goles abajo. El arquero paranaense le extirpó la pelota a Ricardo Chavarri cuando se iba sólo para estirar la brecha en el marcador, a los 31 minutos.

Antes del entretiempo, el mediocampista Martín Cabrera tuvo que suplir a Jorge Torres a raíz de una lesión muscular del Coki. Sin demasiadas ideas para concretar la igualdad, el elenco entrerriano tuvo que irse al descanso en desventaja.

En el inicio del complemento, Diego Romero hizo su ingreso por Emanuel Urresti en una clara apuesta por cambiar la imagen del primer tiempo por parte de Marcelo Fuentes. El dibujo del Negro pasó a ser un 4-3-1-2 y tuvo al sureño como enlace, lo que generó más peligro desde el arranque de la etapa.

Primero, el Chaca Bustos exigió a Losa con un remate de media distancia, pero el arquero respondió bien arrojándose hacia su izquierda. Casi al instante, Romero tuvo el empate con un disparo que rozó el palo izquierdo. Y en una de las más claras, Cabrera no pudo conectar el centro del comodorense, que una vez más desequilibró por izquierda.

A los 17’ Leopoldo Gutiérrez entró en lugar de Leonardo Roda para ser el compañero de Diego Jara en la delantera. La producción de la Joya estuvo muy lejos de lo que habitualmente muestra y eso se sintió en la estructura del Rojinegro.

En ese contexto, Almirante Brown aproximó peligro con un remate que se desvió en Facundo Talín en una de las pocas llegadas que tuvo desde el reinicio. Más tarde, Bustos volvió a probar desde afuera del área, pero su disparo salió desviado.

Con el transcurso de los minutos, Patronato perdió profundidad y equivocó el camino. Los constantes pelotazos impidieron que Romero vuelva a tener un contacto fluido con la pelota y las cosas se simplificaron para los de Blas Armando Giunta. Incluso, el Mirasol avisó con un anticipo de Daniel Vega dentro del área, luego de un buen centro desde la izquierda.

A los 29 minutos, Walter Andrade convirtió tras un tiro libre de Bustos, pero su gol fue (mal) anulado por posición adelantada. De allí, Patronato vivió su peor momento: Bértoli se fue expulsado por un supuesto gesto contra uno de los asistentes de Maximiliano Stevenot y al no tener cambios, el uruguayo Gerardo Acosta tuvo que ponerse los guantes.

Eso fue decisivo para que el rendimiento de los de Fuentes decayera. Sin el dominio del balón, el local tuvo la posibilidad para convertir el segundo con un contragolpe que culminó con una definición desviada de Marrone y luego con un tiro libre de Garré que fue desviado por el improvisado guardameta Rojinegro.

Así se fueron las esperanzas del equipo paranaense en un partido de trámite chato, en el que no pudo aprovechar su momento. Con este resultado, Patrón sufrió su segunda caída consecutiva como visitante (tercera en lo que va del torneo) y acumuló su tercer partido sin ganar. Además, resignó la chance de mantener su distancia con los principales animadores del certamen.

Ahora, el conjunto entrerriano tendrá que pensar en revertir su imagen cuando reciba a Independiente Rivadavia de Mendoza, uno de los elencos más irregulares de la divisional. Será el lunes, a partir de las 19.30, en el estadio Grella, donde se mantiene invicto y donde cosechó diez de los 12 puntos que tiene en el campeonato.

Edición Impresa