N.B. de ANÁLISIS DIGITAL

El 6 de abril de 2018, el Tribunal de Juicios y Apelaciones compuesto por Carolina Castagno, Cristina Van Dembroucke y José María Chemez, condenó al ex perito balístico del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Antonio Vitale a 12 años de prisión. En el juicio se ventiló la investigación llevada a cabo por el fiscal Ignacio Aramberry, en cuanto a la responsabilidad de Vitale y otros imputados sobre la sustracción de armas de fuego secuestradas en distintas causas -archivadas en el depósito de Tribunales- y reinsertadas en el mercado ilegal. Castagno fue la presidenta del tribunal de juicio, y fue quien fundamentó la sentencia condenatoria contra Vitale.

En abril de este año, esa sentencia de primera instancia fue confirmada por la Cámara de Casación Penal de Paraná. Luego de esa última decisión judicial, los abogados presentaron este lunes un recurso de impugnación contra el fallo que confirmó la condena. Pero a los argumentos defensivos que venían sosteniendo agregaron uno: apuntaron a la jueza Castagno por supuesta falta de imparcialidad. Y para sustentar eso, invocaron una entrevista dada el 12 de junio de 2017, cuando la IPP estaba en pleno desarrollo. Se trata de la entrevista que dio Castagno en el Consejo de la Magistratura, cuando rindió para dejar de ser fiscal y convertirse en jueza.

–De ningún modo, la circunstancia de pertenecer en la actualidad a la estructura del Ministerio Público Fiscal (MPF) me va a impedir actuar como independiente en el marco de un proceso judicial. En absoluto. No veo la forma, porque tengo principios y los respeto. Estos principios que son de rectitud, de objetividad y de honestidad en el desempeño de mi función. Hoy en día, con esta crisis de legitimidad que tenemos todos los que pertenecemos y desempeñamos cargos públicos, de los cuales no son ajenos quienes trabajamos en la Justicia. Es decir, hoy en día estamos enfrentando esta realidad donde a miembros del Poder Judicial se los está investigando por mal desempeño, donde estamos investigando a funcionarios públicos por delitos de corrupción, donde pertenecientes a la Iglesia se los está investigando por haber atentado contra la integridad de menores. Y la única respuesta es la absoluta independencia y la honestidad en el cargo – , expuso en su momento la mujer.

–Usted habló de crisis de legitimidad del sistema ¿Del poder político del Estado? ¿A qué alude? – preguntó uno de los consejeros.

–La crisis de legitimidad fundamentalmente en quienes desempeñan la función. Es donde más se acentúa. Es decir, quienes están desempeñando los roles. Estaba haciendo referencia a que hay un descrédito de los que pertenecemos al Poder Judicial que realmente veo con mucha tristeza. Tantos años de trabajar en la Justicia y, estar hoy en día escuchando que no creen en una resolución de un juez, que lo ponen en duda o que no creen en la actuación de un fiscal. Esto lo escuchamos a diario, a veces sin conocer cuál es el compromiso real que tenemos los que pertenecemos a la estructura y de la forma que trabajamos. A diario escuchamos que ‘el fiscal no investigó’, ‘el fiscal ocultó pruebas que no se le dan a conocer a las partes’, ‘que el juez no tomó en cuenta porque seguramente tuvo una conexión que lo llevó a fallar de una manera u otra’. A esa crisis de legitimidad me refiero – respondió Castagno.

–En realidad, la cuestión de fondo es una crisis de la democracia ¿no? Básicamente, el tema final es ese. Pero entiendo que las causas que atribuye usted, es a una defectuosa comunicación, falta de información adecuada a la opinión pública— comentó el consejero.

–Y también hay casos que son reales – se apuró a responder.

–Hablé de mal desempeño de funcionarios pero se está investigando también a quien ha pertenecido a la estructura del Poder Judicial, quien estaba encargado de la sección de efectos secuestrados que vendía armas a los delincuentes-- precisó.

--Si si, claro—

--La falla es también en la selección y el no control de quienes desempeñan los cargos ¿no? – ahondó.

Los abogados acompañaron su impugnación con un soporte tecnológico en el cual está grabada la entrevista a la jueza. Ahora, la Cámara de Casación deberá resolver si hace o no lugar a la impugnación. En caso de que los abogados no consigan lo que buscan, podrán recurrir en queja al Superior Tribunal de Justicia (STJ).

Un consejero que participó de esa entrevista realizada hace casi dos años, comentó a ANÁLISIS que en su momento, consideró a la aspirante a jueza como “muy solvente”. Además, ante este medio, los abogados defensores de Vitale descartaron denunciarla por mal desempeño.