
No hay mañana ni para Rowing, ni para Ciclista. Dos conjuntos que se propusieron ser protagonistas volverán a encontrase en una definición que hasta acá fue pareja, equilibrada, muy disputada y con cierres de partidos calientes.
El primer choque lo ganó Rowing en suplementario. La revancha fue para Ciclista en un pleito de muchas tensiones. Este miércoles, desde las 21.30, se volverán a ver las caras a sabiendas que afrontarán otro desafío grande y exigente.
Los partidos decisivos no se juegan, se ganan. Eso dicen, ¿será así? Puede ser, pero jugar bien y hacer lo correcto significa tener más chances de ganar. En este sentido, Rowing y Ciclista saben que no tienen margen de error y que deberán estar lúcidos y concentrados para hacer el trabajo que se pretende.
Desde ya, en la buena defensa está el argumento más importante. Custodiar bien la propia canasta servirá para controlar argumentos ajenos y tener más oportunidades en ofensiva, consigna El Diario.
Otra cuestión pasa por el aspecto psicológico. Los dos son equipos con una importante cuota de elementos jóvenes, más Rowing que Ciclista. La ansiedad y el nerviosismo también juegan. El que sepa controlar esa situación tendrá un panorama más claro como para tomar las mejores decisiones