Las modificaciones que desean reescribir los legisladores de la Cámara Alta se refieren, entre otros, a los empleadores de menores de entre 16 y 18 años se les exija que afronten los gastos para que los trabajadores terminen sus estudios. En ese contexto, también se buscará equiparar a las licencias por maternidad y paternidad biológica y adoptiva. Asimismo se estudia la posibilidad de que los jornales se paguen mediante otros mecanismos que no sean cheques, a la vez que propuso que aquellos empleadores que no estén inscriptos en Ganancias puedan hacer algún tipo de deducción.

Por otro lado, los artículos que no serían modificados son aquellos que amplían varios derechos, como los de vacaciones pagas, aguinaldo e indemnización por despido, que se duplicará respecto de los niveles actuales. Además, se obligará a los empleadores a contratar un seguro de accidentes.

La iniciativa modifica la Ley de Contrato de Trabajo y establece nuevas condiciones laborales tanto para las empleadas de casas particulares como para aquellas personas que se dedican al cuidado de personas. Entre otros aspectos, el proyecto limita la jornada laboral a ocho horas diarias, incorpora la licencia por maternidad y amplía el período de vacaciones.

En esa línea, se establece que las empleadas de casas particulares podrán gozar de una licencia por maternidad de tres meses (comenzando 45 días antes del parto), mientras que el pago del salario correrá por cuenta de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), como ocurre en cualquier otro trabajo en relación de dependencia.

Según precisó Uno, el texto establece que la jornada laboral quedará limitada a ocho horas por día y 48 horas semanales, a diferencia de la ley vigente, que permite hasta 12 horas diarias de trabajo para el personal sin retiro y no dispone límites horarios al personal con retiro. Una vez que se convierta en ley el proyecto, el empleador podrá establecer una distribución desigual de las 48 horas de trabajo semanales, pero sin que ninguna jornada exceda las nueve horas. La norma establece además un descanso semanal mínimo de 35 horas, a partir del sábado entre las 13 y las 16, mientras que los días de vacaciones también se va a equiparar a lo que establece la ley de contrato de trabajo, con 14 días por año que aumentan según la antigüedad.

Según ese régimen, el período de descanso anual llega a los 35 días una vez que se cumplen 20 años de servicio. De acuerdo con el texto, las empleadas tendrán la misma cantidad de días de licencia por enfermedad; además, el empleador deberá contratar un seguro de riesgos de trabajo, y la indemnización por despido se duplicará (hoy es de medio mes de sueldo por cada año de antigüedad).

La iniciativa, que prohíbe además el trabajo a menores de 16 años se aplicará en todos los casos e incluye a niñeras y a quienes cuiden adultos o discapacitados sin conocimientos profesionales.

Igualmente, la secretaria General del sindicato de Empleadas de Casas de Familia de Entre Ríos, Manuela Muñoz, expresó a La Red Paraná : “Casi ningún plan es incompatible con el aporte por el servicio doméstico”. Y añadió: “Pasamos a estar equiparadas con cualquier otro trabajador, ya que el decreto vigente no nos protege, mientras que la ley nos da beneficios a nosotros y al empleador”.

La dirigente sindical desmintió que las trabajadoras blanqueadas pierdan los planes, como en muchos casos se cree. En ese sentido comentó que “actualmente se unificaron los planes (por ejemplo Asignación Universal por Hijo, Asignación por Maternidad o tarjetas sociales) y casi ningún plan es incompatible con el aporte”.

La sindicalista recomendó a los empleadores blanquear a la trabajadora para evitar problemas: “La empleada trabaja en negro, se va y lo denuncia y pierde el empleador por más que diga que no la blanquea para no hacerle perder el plan”. En ese orden, aseguró: “Las asignaciones no se pierden. Lo mejor para el empleador es acercarse y preguntar para evitar una denuncia”.

Asimismo, Muñoz sostuvo que su sector aportó ideas para lograr una ley que no perjudique al empleador, ya que hay muchos empleadores que son empleados. En ese orden, Muñoz destacó: “La licencia por maternidad la va cubrir la Anses. Nosotros no teníamos licencia porque el empleador no podía pagar dos empleadas al mismo tiempo. Con la ley se pretende garantizar que el Anses, que es adonde nosotros aportamos, cubra toda la licencia y la Asignación Familiar”.

Igualmente, manifestó que la legislación tiene que contemplar a las jóvenes que estudian. Si bien Muñoz no se mostró de acuerdo con el pago de un plus por estudio, que contempla el texto actual, dijo que “en realidad hay que garantizar una jornada laboral más corta y la cantidad de días por exámenes”.

Manuela Muñoz invitó a las trabajadoras o a sus empleadores a pasar por la sede de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) en Tucumán 278 en Paraná para informarse.

“Hay empleadores que están alertas porque quieren saber cómo va a quedar el aporte, pero en realidad todos estamos alertas, porque en la actualidad el pago que hace la empleada es alto”, y añadió: “Queremos que aquel empleador que es empleado tenga ciertas garantías para poner en regla a su empleada, como ser recibir un beneficio o ayuda, ya que hay docentes o empleados de comercios que tienen niñeras o empleadas y no pueden hacer frente a todo”.

La dirigente sindical contó: “Estamos estudiando los detalles de la ley, cuáles son las modificaciones que se proponen, porque nosotros también queremos cuidar a nuestros empleadores, pero resguardando nuestros derechos”.

Las estadísticas que maneja el Sindicato de Empleadas de Casas de Familia indican que entre 2010 y 2011 se incrementó la cantidad de empleadas, como así también el blanqueo de trabajadoras. “No hay números reales concretos todavía, pero lo que sabemos es que va en aumento la cantidad de empleadas como también el blanqueo. Por ejemplo entre 2010 a 2011 aumentó un 13% la cantidad de empleadas. Al mismo tiempo subió la cantidad de chicas en blanco”. Muñoz pidió a las trabajadoras que llamen al 4030362 o vayan a la CTA para conocer sus derechos.